capítulo 14

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Narrador omnisciente.

—entonces, ya pasaste por algo muy parecido— habló una voz gruesa al lado de Sam, provocando que el y Steve alzaran la vista de la tumba para ver al responsable, Nick Fury.

—si, algo así— dice Steve, mirándolo con serenidad mientras que por dentro deseaba darle una diminuta sonrisa de lado.

—“el camino del hombre recto”— leyó las palabras escritas sobre la lápida de madera, haciendo una pequeña mueca, y sin levantar la vista, habló:—examinamos los expedientes de HYDRA— se volteó a mirar a ambos —no todas las ratas se ahogaron en la nave—el rubio no necesitaba ser muy listo para entender el significado de sus palabras.

HYDRA no estaba destruido completamente, y se esconden en diferentes partes del mundo...

—volaré a Europa esta noche—volvió a hablar Fury, haciendo que Steve saliera de sus pensamientos—¿Te interesaría venir?

—debo hacer algo antes de eso—respondió unos segundos después— el ex-director de S.H.I.E.L.D observó a Sam.

—¿Qué opinas, Wilson? Busco a hombres con tus habilidades—el nombrado miró con duda al Capitán antes de mirar a Nick.

– soy más soldado que un espía—sin más, Fury asintió volviendo a mirar su tumba vacía.

—de acuerdo....—le tendió la mano a Wilson, quién la estrechó sin problema.
El rubio lo miró seriamente antes de dignarse a estrechar su mano con la de él, en señal de despedida .

—si pregunta por mí, que vengan a buscarme, justo aqui—con un leve movimiento de cabeza señaló la lápida, Steve hizo un pequeño asentimiento.

—es un honor, nunca estuvo más cerca de decir gracias—Natasha caminaba despacio hacia ellos con la menor a su lado, mirándolos con una pequeña sonrisa.
Steve se sorprendió al verlas a ambas, pero no lo demostró.

—¿No irás con él?—preguntó mientras se acercaba a la pelirroja mayor, hasta detenerse a escasos centímetros.
—no— negó con una sonrisa sin mostrar los dientes.
—¿Y no te quedarás?
—no— no pudo evitarlo y sonrió, mostrando su dentadura perfecta, mientras que la Banner los observaba en silencio—expuse mi identidad, tengo que buscar otra—Steve asintió, ahora dirigiendo su mirada a la ojiazul.

—¿Y tú?— Emma solo hizo un movimiento de cabeza, dándole a entender que ella también se iba por un tiempo indefinido.
—pasaré tiempo con mi padre y después desapareseré, no puedo hacer otra cosa— el rubio asintió, volviendo a mirar a Natasha.

—tal vez tardes un rato.
—espero que sí—ambos se miraron en silencio, ante la incómoda mirada de Emma—tenemos lo que pediste—volvió a hablar la ex-agente mayor, tendiéndole una carpeta amarilla con varias hojas—cobré unos favores de kiev— Rogers tomó el archivo entre sus manos.

Steve los miró un tiempo, respirando profundamente antes de expulsar el aire, siendo consciente de que sus tres amigos lo estarían mirando.

—¿Nos harías un favor?—la pelirroja menor sabía de qué hablaba, por eso la interrumpió.
—Busca a la enfermera— Emma lo miró pícaramente, al mismo tiempo que el Capitán la miraba con una sonrisa entre enamorado, feliz y nervioso.

—Les dije que no lo es.
—y tu no eres agente de S.H.I.E.L.D— contraatacó Romanoff, poniéndose en el bando de su amiga.
—¿Y cuál es su nombre?
—Sharon? —Nat bajó un poco la mirada, aún con su sonrisa—es linda—aseguró, y solo con eso Steve sonrió sin mostrar los dientes como un tonto adolescente hormonal enamorado de la chica linda de su clase.

Natasha lo miró unos segundos antes de subir un poco la mirada y besar la mejilla del rubio, provocando que Emma abriera su boca con sorpresa, mientras que Sam se reía de aquella reacción.

Ambos se separaron mirándose sonrientes antes de que Natasha se diera vuelta y comenzara a caminar en dirección a su auto, siendo consciente que la otra pelirroja la miraba todavía.

—ten cuidado, Steve—detuvo su caminar para volver a mirarlo—tal vez no sea bueno lo que encuentres—señaló con su mirada el folder, antes de volver a caminar hacia el auto, donde esperaría a Emma.

La chica se acercó a Steve y observó su contenido con el moreno del otro lado, viendo una foto antigua de Bucky en estado de criogenilización, y en la esquina de esta, una vieja foto en blanco y negro de Bucky cuando era militar en la segunda guerra mundial.

—iras tas él ¿No?— Sam murmuró a sus espaldas, pero Rogers no se inmutó.
—no tienen que acompañarme— habló en plural para que la pelinaranja también lo escuchara, al mismo tiempo que la bocina del auto de la risa era tocada fuertemente.

—¡Ya voy! — la pelirroja rodó los ojos desde el asiento del conductor.

Emma volvió a mirar a ambos hombres.

— lo sé......—

¿Iniciamos cuando?....

(Corto pero valió la pena)

la hija de Bruce Banner #MarvelawardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora