Noche para dos

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Al fin había llegado a casa, estaba exhausta. Me lancé a mi cama y estaba por ir a dormir pero recordé lo sucedido hace unas horas, iba a tener una cita, mi primera cita, con Rakan.

¿Qué se supone que haga? No se a donde vamos así que tampoco se que debería usar. Las dudas comenzaban a molestarme así que decidí hacer una llamada a una experta en la materia.

- ¿Ahri?

- Buenas noches, Xayah. ¿Qué sucede? Nos acabamos de ver hace tan solo un rato. Es raro que me llames tan tarde.

- Necesito tu ayuda ¿puedes?

- Claro, cuentame que pasa.

- Bueno... Mañana tendré una cita, con Rakan.

- ¡¿Hablas en serio?! No me esperaba esa noticia.

- Pero no se que hacer, jamás he salido con nadie.

- Comprendo el problema, no te preocupes, deja todo en mis manos. ¿Cuándo pasará por ti?

- Vendrá a recogerme a las ocho.

- Perfecto, es tiempo suficiente.

- ¿Para qué?

- Para prepararte, obviamente. Este es el plan, nos veremos con las demás en la plaza mañana a las diez.

- ¿Se acostumbra eso antes de una cita?

- Tu primera cita debe ser especial, es hora de un tiempo de calidad entre amigas.

•••

Cuando llegué a la plaza las demás ya me estaban esperando, se veían emocionadas, seguramente Ahri ya les habría contado el porqué estábamos ahí desde temprano.

- Buenos días chicas.

- ¡Xayah! Ahri nos contó la noticia - dijo emocionada Sarah- seguro tendrás una gran noche.

Un rubor apareció en mis mejillas, me sentía apenada por alguna razón.

- Bueno chicas, éste es el plan para hoy - comenzó a hablar Ahri con voz de líder - primero la ropa, después maquillaje, relajamiento y belleza en la estética y para terminar, un helado.

- ¡Yo quiero ayudar a elegir la ropa para Xayah! - exclamó Neeko con la euforia de siempre mientras me comenzaban a arrastrar hacia las tiendas.

- ¿Qué es lo que harán esta noche? - preguntó Neeko.

- No tengo idea, tampoco me ha llamado ni enviado un mensaje desde la última vez que nos vimos ayer.

- Bueno, teniendo en cuenta la hora, podrían ir al cine, a cenar o algo parecido - contestó Ahri.

- En ese caso busquemos ropa para la noche - dijo Sarah - vamos a esa tienda, seguro encontraremos algo para ti.

Después de mucho buscar y descartar outfits, me mandaron al vestidor a probarme las posibles opciones.

- ¿Qué tal éste vestido?

- ¡Se te ve increíble, amiga! - dijo Ahri muy entusiasmada - debes llevarlo.

Al final compré ese vestido, era color lavanda con escote en forma de corazón y corte imperio. En cuanto al maquillaje nunca me ha gustado usar demasiado, mis amigas estuvieron de acuerdo ya que dijeron que mi piel era muy bonita y no necesitaba cubrirla con maquillaje, así que solo compramos un brillo y unas sombras para los ojos. Después de eso fuimos a la estética.

- ¡No quiero que toquen mis orejas!

- Xayah tranquila, no hagas un alboroto - trataba de calmarme Sarah.

Un nuevo compañeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora