Sun and Moon ||Solangelo||

Besos.

1. Beso indirecto.

Ambos estaban en la azotea de un edificio de New York, completamente distraídos de su alrededor. Aquella tarde Will lleva en su almuerzo una dulce ensalada de frutas, el silencio reinaba en el lugar y era bastante cómodo a decir verdad. Por su lado Nico comía una cajita feliz como si fuera su última cena, ambos eran tan distintos y aún así se acompañaban cada segundo luego de la declaración que los convirtió en una pareja.

― ¿Quieres un poco Nico? ― Hablo su pareja observando al menor sonrojarse hasta las orejas, lo había pillado mirando con deleite aquel postre.

― No, n.. no. Es tuyo, no debería. ― El tono de su voz era bajo y la forma en que se expresaba era casi como si tartamudeara.

Will era bastante obstinado, y un poco atrevido (según palabras del chico de los cuarenta) De verdad todo un misterio era para su pareja, no solo era genial frente a todos sino que era perfecto a solas, mucho más expresivo de lo que esperaba. El muchacho urgo con su cuchara en la ensalada y pronto saco un poco y lo acerco a la boca de su acompañante.

― Di "Ahh" ― Dijo en un tono coqueto y sonrío mientras su novio reía, Nico abría su boca recibiendo aquel dulce sabor llenando su boca.

Pronto el menor se tiño completo de rojo, no podía ser ¡No, no y no! Con la cuchara aún en su boca el chico de grandes ojos estaba asimilando lo que acaba de suceder. Acababa de recibir un beso indirecto de su novio.

― Parece que estaba deliciosa.

― Umm, si. ― Dijo dejándose llevar, pronto se dio cuenta de lo que dijo y bajo la mirada jugando con sus dedos.

― Que tierno eres sombritas. ― El rubio despeino a su novio y llevo una cucharada de ensalada a su boca, Di Angelo casi se ahoga en su propia saliva, ahora era el otro muchacho quien recibía un beso indirecto.

Definitivamente Nico iba a dejar de ver anime.

2. Beso en la frente.

Will estaba observando más detalladamente al chico que lo acompañaba nunca se había parado a mirarlo tan detenidamente, su novio era un par de centímetros más bajo y su cabello se extendía hasta debajo de sus orejas con rastros de que alguna vez fue rizado y se detuvo en los hermosos hoyuelos que se formaban en el rostro de su pareja cada vez que sonreía de manera inconciente, ¡Como no amarlo!

― Will. ― Su voz tembló y sus mejillas tomaron un tono carmesí, el mencionado no perdía detalles de sus expresiones, Nico Di Angelo era un ángel en la intimidad.

― ¿Si?

― No me mires de ese modo, me avergüenza maldición― Su voz era casi un susurro y la forma en que apretó sus labios hizo jadear a su pareja ¡Tan tierno!

― Sombritas. ― Su voz llamo la atención del menor quien volteo a verlo y definitivamente no se esperaba lo que sucedió. Los labios estaban sobre su frente, eran tan cálidos y dejaron ardiendo aquella zona. Dios, sintió como se le iba el alma del cuerpo. ― Eres tan adorable.

3. Beso en la mejilla.

Ir al cine era una actividad típica desde que se hicieron pareja, Will aquella ocasión había disfrutado de un Nico que sonreía de una extraña forma viendo aquella película que todos los adolescentes comentaban, era una lo más escabroso del momento, dos horas de terror gráfico y psicológico.

― ¡Fue sensacional Will! Creo que hasta realista. ― Hablo con un tono eufórico que hizo reír al más alto que abrazo por el cuello a su pareja.

―Que gustos tan extraños amor, aún así amo la pasión que tienes hasta en lo más mínimo― Los colores se le subieron en un par de segundos al rostro del pequeño Nico. ― Igual no llega ni a los talones a un musical de Broadway.

― Que horrible gusto el tuyo solecito. ― Ambos se sacaron la lengua como dos niños y siguieron caminando entre risas.

Su caminata fue en silencio, de vez en cuando sus miradas se cruzaban y sus sonrisas declaraban silenciosamente todo lo que ambos sentían, Nico relamio sus labios y sonrío todavía no asimila que su crush termino correspondiendo.

― Bueno, yo voy al campamento, el gran jefe de la enfermería es muy cotizado― Nico torcio los ojos y abrazo a Will, después de todo no iban a verse en unas semanas porque Di Angelo estaba concentrando una misión para Hades y para no preocupar a su pareja por un exceso de viajes de sombra decidieron no verse hasta que Nico estuviera libre.

― Saluda a Kayla, debe estar ansiosa por verte llegar. ― Hablo con un tono lleno de burla, conocía bastante a su cuñada como para saber que esperaba ansiosa a su novio. ― Suerte solecito.

― Descansa Nico, te quiero. ― Ambos estaban dispuestos a seguir sus caminos pero antes de hacer se giraron al mismo tiempo cada uno llamando por su nombre al otro, por consecuencia soltaron una carcajada.

Di Angelo tomo valor y se acercó a su novio, lo miro durante unos segundos. Mientras el mayor miraba un poco extrañado analizo toda la escena que fue tan rápida. Nico había sujetado su hombro a la vez que estaba en puntas de pie depositando un beso en la mejilla del más alto; El calor inundó el lugar donde los húmedos labios hicieron presión, aquel calor pronto se expandio hacia todo el cuerpo del Solace.

― Yo también te quiero Will. ― Dijo antes de huir hacia el edificio.