𝗠𝗬 𝗕𝗢𝗬 ♡︎ 𝗬𝗨𝗡𝗛𝗢

Ｄｅｆｅｃｔｏｓ

El recuerdo cuando nos conocimos es palpable en mi cabeza; tierno y amigable.

Lo que había empezado cómo una amistad que le gustaba hacer tareas juntos, comer helado y pasar las tardes completas, floreció en un dulce amor que conservaría en mi corazón. Un cuento de hadas, el tono rosa al imaginarlo, todavía quiero obligarme a creer que seguimos así.

Aveces preguntaba que pasaba en tu mente el día que contestaste tus puros sentimientos hacia mi, cómo tus manos temblaban sutilmente sosteniendo la caja de chocolates que tanto me gustaban y una linda pulsera de corazones a juego. Fue el mejor día de mi vida desde que tenía memoria, pero ahora...

Se me hace extraño no verte con la misma pulsera hace días.

Un detalle cómo esos no es la gran cosa, la verdad, prefiero pensar que aquel tenue olor agridulce de mi corazón no importa. Con lo despistado que eres al caminar, seguro se te perdió en algún lugar o la dejaste en la ducha, estoy segura que fue alguna de esas dos razones.

Los días pasan hasta que me doy cuenta que nuestra relación va a cumplir un año, el dulzor de tus actos estremece cada parte de mi y roba cada una de mis sonrisas, pero si soy sincera, siento la ausencia tuya cómo una estaca directo a mi corazón. ¡También estoy segura que no es tu culpa! La época de exámenes es difícil, la universidad nos llegó cómo un balde de agua frío y el estrés no da paso.

Eres mi único chico como soy tu única chica, ¿no?

"Mi chico actúa sospechosamente, él es muy raro."

Veo la ventana cuando hablo para deshacer el hecho que ya no me escuchas, extraño la cálida sensación de enredar mis manos con las tuyas cuando cruzamos los semáforos, los abrazos luego de una linda película o los besos que me relajan antes de ir a dormir.

Me pongo a mirar mi propio reflejo para darme cuenta que mi vestido se ha arruinado con mi entristecido rostro, el lindo listón de mi cabeza cae a la cama al igual que mis ilusiones, el maquillaje se ha cuarteado y desmaquillarse duele tanto cómo pasar un papel ardiente entre mis lágrimas. Ha pasado tantos días juntos que la rutina aveces es aburrida, las citas son la mejor parte del fin de semana, pero caigo a mi cama para ver el techo, la única distracción que tendré estos últimos días de respiro, me has cancelado la cita que tanto espere por tantos meses.

Pero solo es un aniversario, no vale la pena llorar.

"Mi chico ama a sus amigos como yo amo mis puntas abiertas"

No me gusta mantener esas aburridas peleas cuando estoy a tu lado y pasas de largo con tus amigos, dicen por algunos lados que las amistades eternas, y parece que ha sido demasiado cariño para cancelar nuestra cita por una salida tan... casual. ¿Pero acaso eso importa? Me pregunto varias veces mientras abrazo el oso de peluche que me regalaste, no hay nada que lamentar, también estoy segura que era el cumpleaños de alguno de ellos o algo así, nada para poder llorar.

Mi chico ha tomado su tiempo de remarcar mis defectos cada vez que me miro al reflejo. Por más que me gusta mi cabello y su textura qué se enreda entre mis dedos, por más que me gusta mis piernas y los lindos vestidos escotados, sé qué lo estás diciendo para mejorar y no para insultarme cómo dicen mis amigas, solo son palabras venenosas.

Así que esos defectos los he corregido totalmente como dijiste que lo hiciera.

¿Estas feliz por eso?

Comenzando a reeditar una historia que escribí cuando era un retoño de bruja inexperta —y sigo siéndolo—, pero un poco más decente. <3