Future of Class 77-B | Oneshots y headcannons |

Llegada a Jabberwock Island.

Hinata's P.O.V

Hemos pasado por mucho y al fin, somos libres. Llevábamos años atrapados en la desesperación pero gracias a la Future Fundation pudimos ser liberados... aunque no saliera tan bien como esperaban. La famosa Junko Enoshima hizo de las suyas y consiguió hackear el Neo World Program, aún así la derrotamos .
Vimos a nuestros compañeros morir y ser ejecutados por asesinarlos. "¿Realmente está bien que las víctimas confíen en las personas que les mataron?" llevo desde que subimos a este barco pensándolo. Aunque no fuera real igualmente experimentaron la muerte por ser asesinados... eran las víctimas, a excepción de Nagito Komaeda quien era su propia víctima.
Aquél chico lucía bastante tranquilo mientras miraba al mar, no le entiendo. En cuanto notó que le miraba se dió la vuelta.

— Hahah... ¡parece que alguien me observa!

— ¿Qué? ¿Yo? Yo no te estaba observando, no sé de qué hablas— no sé cómo se dió cuenta...

— Oh... entonces será que mi sexto sentido me ha fallado... que extraño— dijo en un tono burlón.

— Bueno, tú eres el que has de saber sobre sextos sentidos, ¿no es así, Kamukura?— ¿de verdad tenía que bromear sobre eso?

— Oye, eso no tiene gracia, no puedes hacer una broma sobre algo que prometimos no comentar— todos los compañeros prometimos no mencionar nada de los Remants of Despair ni del Neo World Program en voz alta por nuestra salud mental pero Komaeda se saltaba esa norma siempre.

— Oh perdón Hinata-Kun... la basura como yo suele tener mala memoria.

— No eres basura, cállate ya.

Antes de seguir con la conversación, alguien nos interrumpió.

— ¡Hey vosotros dos! ¡Dentro de nada va a anochecer y llegaremos por la mañana, no me dará tiempo a preparar un desayuno así que he preparado un buffet para conmemorar este momento!— exclamó Hanamura.

— ¡Ah sí, ya vamos!— Komaeda se dirigió a donde estaban los demás dejandome atrás.

Cuando llegamos al comedor, nos sorprendimos por la cantidad de comida que había. Como era de costumbre, Hanamura se esforzó con la comida pero esta vez fue mucho más especial.

— ¡WOAH, TERUTERU-KUN, REALMENTE TE HAS ESFORZADO MUCHO!— exclamó Owari mientras abrazaba a Hanamura apretándolo contra sus pechos.

—D-D-D-...¡DE NADA!— caía un poco de sangre por el orificio nasal de Hanamura.

Ambos lloraban de la alegría. Owari por la comida y Hanamura por... bueno viniendo de un pervertido se sabe por qué.

— Yo... no tengo mucha hambre como de costumbre pero supongo que comeré algo...— incluso Mitarai se alegró del esfuerzo de Hanamura. Aquél chico era muy delgado y parecía que se iba a romper en cualquier momento pero para eso estaban Mikan y el impostor quienes le cuidaban muy bien y se aseguraban de que su salud fuera buena.

— ¡MUY BIEN RYOTA-KUN!— gritó Mioda quien seguidamente se abalanzó sobre la comida.

En general todos estaban muy felices y agradecidos con Hanamura. Incluso yo.
El buffet incluía comida de todo tipo, desde hamburguesas comunes hasta extravagantes platos como pescados al horno y distintos tipos de pastas. Yo tomé una ensalada con queso y un zumo de naranja. También había alcohol pero no me apetecía.

Tras el buffet Mioda-San nos dio un concierto. Su música no es muy agradable así que casi nadie prestó atención excepto Saionji, a ella sí le gustaba su música. También recuerdo a otra persona que disfrutaba y contribuía en sus conciertos...

Ya era muy tarde y nos fuimos a nuestras respectivas habitaciones. Algunos compartían habitaciones:
La señorita Sonia y Tanaka, Nidai y Owari, Kuzuriu, Pekoyama y Kazuichi, Ryota y el impostor y Saionji y Koizume. Los demás dormíamos solos.
La habitación no era muy acogedora que digamos pero al menos pude conciliar el sueño.

*Toc* *Toc* *Toc*

Alguien llamó a la puerta, ya era de día así que supuse que era para despertarme.
Abrí la puerta y allí estaban esos tres, Komaeda, Kuzuriu y Kazuichi.

—¡¡Buenooooos díaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaasss!!— dijo Kazuichi.

— Ya... ya basta ya puedes parar... estoy despierto— claramente seguía un poco dormido.

— Tch... vamos Hinata, no tenemos todo el día— replicó Kuzuriu.

En cuanto ví a Komaeda sonriendo detrás de esos dos me levanté del susto y me miraron bastante mal.

—¿Que cojones haces saltando tan derrepente? ni que hubieras visto un fantasma— les señalé para que se dieran la vuelta.

— AAAAHHHHG KOMAEDA, ¡¿CUÁNTO TIEMPO LLEVAS AHÍ?!— gritó Soda.

— Oh... supuse que despertarian a Hinata así que les seguí. Veo que no soy bienvenido ¡haha!— Komaeda se fué.

— Komaeda no ha cambiado...— comentó Kuzuriu.

— Bueno Hinata, vístete rápido, en media hora llegaremos a la isla.

Cerré la puerta y ellos se fueron.
Cuando me vestí salí y allí estaban todos, esperando llegar a nuestro nuevo hogar. Jabberwock Island.

Nota autor/a:

No creo que a la gente le interesen fanfics de danganronpa en 2020. Me aburro.

Hora: 5:22 de la madrugada.

Bye~