Tres

2.2K 249 181
                                    

Changbin pov:

9:30 de la mañana, golpeteos y gritos fuera de mi habitación, mamá se levantó enojada, y yo, simplemente tengo ganas de pegarme un tiro entre ceja y ceja.

- Changbin, levántate ya, eso de andar de vago sabes que lo odio - Habiendo perdido la paciencia, entró y tiró de las sábanas que cubrían mi cuerpo. - Necesito hablar contigo, y todavía tienes tareas que hacer, así que arriba, te doy 5 minutos antes de que me veas enojada - Murmuró con los dientes apretados, bastante molesta.

Chasque mi lengua, suspiré y me levanté, caminé con dirección al baño.

Bajé las escaleras, ya completamente vestido y viéndome decente, mamá y Hyunjin se encontraban charlando animadamente en la mesa del comedor mientras tomaban un café. Me senté frente a ellos, murmure un "buen día" ella giró los ojos y mi hermano mayor simplemente sonrió asintiendo la cabeza en forma de saludo.

- Por fin te levantaste, tenemos que hablar - Asentí, mostrando que la estaba escuchando. - Bueno, como lograste entrar en la universidad, te tenemos un regalo, tu padre, Hyunjin y yo - Hyunjin volvió a ver a nuestra madre, confundido. Yo quería sonreír, hacia años había sido el último regalo que había recibido. Vi como sacaba una pequeña caja azul oscuro, con un lazo celeste en el medio, me la tendió, yo la recibí con mucho gusto. No esperé lo que había dentro.

- ¿Una llave? - La tomé confundido. Ella sonrió ampliamente, y asintió.

- Un apartamento en el complejo universitario, hijo - Por mi parte, sentía alivio de poder estar alejados de ellos por un tiempo, necesitaba descansar un tiempo y sentirme tranquilo, por lo menos un par de meses, y por otro lado, la tristeza me invadió, ellos querían que me fuera, y ella me estaba dando la oportunidad de irme sin ninguna queja, cuando Hyunjin, hace unos años, también quiso irse, nuestra madre lloró y rogó miles de veces que no se fuera, que lo amaba y que no quería estar sin él, ahora, eso no estaba pasando para conmigo.

- Oh... Muchas gracias, Madre - Fue lo único que salió de mis labios temblorosos. - Si me disculpas, la dejaré en mi habitación y luego vendré a hacer las tareas que quedan - Como muestra de agradecimiento, doble mi espalda hacia abajo, haciendo una reverencia, para posteriormente retirarme de allí.

Ya arriba, y sin poder evitarlo más, solté un sollozo ahogado en un rincón, me sentía solo, me sentía mal, me sentía decepcionado conmigo mismo, nunca había sido suficiente, y tampoco entendía porque se sentía tan terrible, si irme seria posiblemente la mejor decisión.

Entonces, ¿Por qué sentía que le ardía el corazón de tanto dolor? ¿Por qué mi mamá se veía tan contenta de dejarme ir? O siquiera, ¿Por qué fue ella la de la iniciativa? si ni siquiera se tomó un momento para preguntarme lo que yo deseaba.

La puerta se abrió lentamente y yo solo me limpié las lágrimas mientras fingía buscar algo bajo mi cama, allí no había nada.

- Binnie - El tono triste de Jin se oyó, inmediatamente volteé a verlo, él se acercó rápidamente, agachándose a mi lado, me acarició las mejillas y de nuevo no lo pude evitar, las lágrimas empezaron a bajar incontrolable mente.

- Lo siento, lo siento por no ser como tú, lo siento por ser quién arruine todo aquí, por haber nacido.- Susurré aferrandome a su camiseta negra.

- Binnie, mirame - Alcé la mirada sin dejar de llorar. - No tienes que disculparte por nada, ni mucho menos por ser tú, no tienes que ser como yo, cada uno vive su vida y la vive a su ritmo. Yo debería disculparme contigo, por todo, por cómo mamá te trata, y por nunca haber hecho nada, por como nuestra familia se desmoronó, papá ni nos habla, y mamá si lo hace es para molestarte a ti, y nunca hice nada. Por eso, quiero redimirme contigo, por no haber Sido un buen hermano, por concentrarme tanto en mí mismo, que olvide, que eres mi hermanito menor, debo protegerte, por eso, iré contigo al apartamento, viviremos juntos, no puedo dejarte, hay muchas cosas que quiero hacer contigo allá afuera, y temo que si te dejo ir solo, te perderé - Sus manos grandes y cálidas me secaron las interminables lágrimas.

No podía arruinar su vida perfecta por mí, no merecía algo así.

- Quédate, tu reputación estará bien si no estás conmigo - Murmuré para esconderme de nuevo, él, alzó mi vista bruscamente, solo solté un quejido como protesta.

- Me importa una mierda mi reputación y me importan una mierda nuestros padres, me iré contigo, no puedo dejarte solo, eres mi hermano menor, no eres ni siquiera mayor de edad, solo tengo miedo de perderte alguien día - Volví mi vista hacía sus ojos y lo abracé.

- Hyunjin, te amo, te amo mucho, eres mi fuerte, por favor nunca me faltes - Lo abracé tan fuerte que el solo soltó un gemido de dolor.

- Binnie, no aprietes tanto que tienes fuerza, niño tonto - Me golpeó entre medio de mis cejas con sus dedos, solté una risita sincera - Jamás te abandonaré, te quiero demasiado como para siquiera pensar en una vida sin tí...




...

..

.

Algunas cosas que quiero comentar:

Sinceramente, se me hace un poco raro estar continuando esta historia, teniendo en cuenta que la escribí hace 6 años, y la última revisión que le hice fue hace 4 años. Tenía un poco de miedo que a la gente no le gustara la nueva versión, pero es que, no tenía mucho sentido JAJAJA, así que acá estamos otra vez, y los dos capitulos que volví a publicar, ya editados, están recibiendo bastante apoyo, y eso me pone contenta, graciassss.

Posdata: Vayan a leer Hot.

.

Changbin, a shadow.  ~Lixbin~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora