Capitulo 3 "Un día con Jin"

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Hann:

Me desperté con la rica brisa que traspasaba mi ventana, me sentía tan feliz, me levanté y empecé a limpiar mi cuarto, deseché algunos objetos que me decidí por cambiar, tendría que comprar nuevas cosas, ya que no traje todo por supuesto, también quite un poco de polvo, aunque para ser tanto tiempo sin uso, no estaba tan sucio, pienso que mi madre de vez en cuando limpiaba mi cuarto.

Me decidí a bajar, iba por las escalera y visualicé a mi madre y mi padre poniendo la mesa para el desayuno, enserio extrañaba verlos juntos, al igual mis abuelos se encontraban ahí, solo hacía falta el flojo de Jin, debe seguir durmiendo pensé.

-Buenos días- dije cuando finalmente había bajado las escaleras.

-Buenos días- me respondieron.

-¿Enserio Seokjin esta invernando, no piensa levantarse?- pregunté.

Mi madre rio por mi comentario -Él ya está despierto, solo fue a comprar algunas cosas.

-Oh- Me limité a decir, quizá Jin allá madurado, y ya no sea el chico de antes, el que no le gustaba ayudar y mucho menos madrugar.

-Ya regresé familia- dijo un Jin entrando de la puerta principal.

-Bien, a desayunar- dijo mi madre.

Y es así como nuevamente tuvimos una plática entretenida en el desayuno con toda la familia.

-Voy a salir- dije.

Todos me quedaron viendo con una mirada esperando alguna otra respuesta, seguí.

-Necesito nuevas cosas, en mi cuarto y aparte mañana voy a la escuela necesito comprar.

-Pero, mi amor, este no es el Seúl de antes, han cambiado ciertas cosas, hay nuevas construcciones, de hecho hay una plaza algo cerca- dijo mi madre.

-Genial- dije levantándome de la mesa dispuesta a ir.

-Hann...- llamó mi madre -Lo que quiero decir es que no puedes ir sola aún, no quiero que te pierdas.

-Mamá por eso, sería genial que yo pueda explorar por mí misma y además...

-Yo la acompañó- dijo Jin interrumpiéndome.

-Perfecto- dijo mi madre con una sonrisa en su rostro.

-Subiré a cambiarme y nos vamos- dijo Jin levantándose y subiendo a su habitación.

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Ahora mismo me encontraba con Jin en plaza, exactamente en una heladería

-Entonces ¿Jackson te puso una trampa?- le pregunté a Jin mientras reía.

-Así es, me hizo quedar mal con esa chica.

-Debo admitir que me cae bien aunque no lo conozco.

-Ja ja ja- dijo un Jin sarcástico -Aunque nadie más ha podido molestar a este hermoso hombre.

Reí por su comentario. Habíamos pasado un buen rato de compras y contándonos demasiadas anécdotas que nos pasaron en este tiempo sin vernos.

Ahora se nos acercaba la mesera -Necesitan algo más- su mirada fue directo a Jin -Todo corre por mi cuenta- era mi imaginación o esa chica desde que llegamos no dejaba de coquetearle a mi hermano, era algo molesto.

-No- me límite a decir, soné más enojada de lo que pensé.

-Ah ya entiendo, se molesta tu novia- dijo aquella chica. Ja que graciosa tipa.

-Ella no es mi novia, es mi hermana, y estamos bien, gracias.

-Oh- dijo y nos quedó viendo, tipo analizándonos y se fue.

Y era cierto, es que realmente aunque Jin y yo fuéramos hermanos no nos parecíamos tanto, él tenía rastros completamente coreanos como los de mi madre y yo como mi padre, a diferencia de Jin mis ojos los que más me caracterizaban rápidamente decía que no era una coreana.

-Hann, ya debemos irnos, recuerda que mamá nos dijo que llegáramos antes de las 6, porque esa hora nuestros abuelos se irán para regresar a Busan.- dijo Jin.

-Pero aún son las 4:00, Jin, podemos quedarnos otro rato, me estoy divirtiendo.

-Lo sé, yo también, pero debemos pasar al supermercado hacer unas compras y caminaremos para que te pueda mostrar cómo llegar a tu escuela, no está muy lejos.

-Estaaa bien- alargue.

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En el supermercado.

Observé como Jin hacia sus compras, wow sí que ya era todo un adulto, bueno no, aún era mi hermano tonto con el que podía bromear.

-Jin, creí que comprarías más cosas tuyas, pero estás comprando comida y todo eso.

-Lo sé, tontita, por si no sabías mamá se la pasa trabajando, el hospital la mantiene ocupada, si horita está acá es porque pidió la semana para este tiempo que papá va estar, en fin eso significa que cuando ella no está yo cocino.

-Oh dios, Seokjin nos vas envenenar- dije con una mueca asustada, creo que bastante divertida ya que Jin río.

-Cuando pruebes mi comida retirarás lo dicho.

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-Bien por allá, es tu escuela- señalaba Jin justo frente de nosotros.

De hecho no estaba tan lejos quizá unas 10 cuadras no lo sé.

-Me gustaría venir caminando a ella, pero es imposible.

-¿Imposible?, Si es lo que hacía, caminaba de la escuela a la casa con unos amigos, créeme que es divertido.

-Lo sé, pero mi problema es levantarme a tiempo.

-Hann en eso no hay problema, sabes que tendrás al hermano más guapo levantándote todas las mañanas.

-Yo diría un hermano tonto molestoso- reí.

-Ja ja ja, que simpática, Hann.

E íbamos caminando ya directo a casa eran las 5:10 llegaríamos a tiempo para despedirnos de los abuelos.

Justamente Íbamos pasando donde antes era la casa de nuestros abuelos, no lo podía creer.

-Jin, ¿enserio ahí es donde vivían los abuelos?

-Sí, impresionante ¿no?

-Sí totalmente.

Es que ya no era la misma casa que solía conocer, la casa de mis abuelos era un tipo de diseño vieja pero acogedora, ahora es una casa algo más grande, elegante, bonita, estoy segura que tuvieron que demoler la casa anterior completamente para hacer ésta.

-¿Quién vivirá ahí?- pregunté a mi hermano.

-No lo sé, realmente es una casa solitaria, no he visto a nadie...em bueno en unas dos ocasiones quizá vi un chico, pero créeme que tiene cara de qué no quiere ser tu amigo- y río por su propio comentario.

-Seokjin que imaginación la tuya.

Y fue así como ya nos encontramos en casa, justo a tiempo, nos despedimos de los abuelos prometiendo que regresarían pronto y mis padres los fueron a dejar a la estación de autobuses. Y ahora mismo me encontraba en mi habitación esperando mañana para iniciar una nueva aventura en la escuela.

"You are the cause..."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora