Hann:
Ahora mismo nos encontrábamos en el avión de ida a Seúl, mi padre y yo, aunque mi padre no se quedaría porque aún le faltaba arreglar asuntos con lo de las empresas, pudo venir una semana, ese tiempo es nada mas lo que estaría, ese fue el tiempo que pudo tener de permiso para venir, aunque él era el jefe eso no significaba que pudiera faltar lo que él quisiera, pero por fin a Corea, no podía contener mi felicidad, voltee a ver a mi padre y pude ver su nerviosismo, si el igual estaba muy feliz.
Decidí hablar -Papá, todo estará bien- tomé su mano.
Con una cálida sonrisa me respondió -Lo sé, cariño. Estoy feliz y a la vez nervioso, por fin veré a tu madre y a tu hermano- una mueca triste se formó en su cara.
-Y ¿por qué estás así?- respondí.
-Es que ya tiene tiempo que no los veo, no sé qué tanto hayan cambiado.
-Ay, papá, si tú todos los días hablas con mamá, siempre está en tu pensamientos, si a eso es lo que le temes, te equivocas, mi mamá y mi hermano saben lo mucho que los queremos y ellos nos quieren mucho, también- tomé su mejilla y la acaricié.
-Tienes razón, cariño, muero por darles un abrazo.
-Yo también, créeme.
____________
Nos encontrábamos en el carro, que mi padre mando a pedir para que nos llevara a casa, era lo bueno que mi padre tuviera las mejores empresas del mundo, tenía influencia donde sea que fuera, decidimos no decirle a mamá la hora en la que íbamos a llegar, para que fuera una sorpresa el vernos en casa.Ahora si estaba parada en frente de la puerta de la casa, mi padre se encontraba bajando las maletas, me decidí y toqué.
Escuché pasos aproximarse y se abrió la puerta, y vi a un joven muy alto y guapo, por supuesto que era...
-Hey, mocosa, ¿qué tanto piensas?, ¿no vas a saludar a tu hermano?- me dijo con una sonrisa en su rostro.
Me aventé a sus brazos y lo abracé muy fuerte -Te extrañé tanto, Seokjin.
-Déjate de formalismos, niña, si siempre me has dicho Jin, o algún apodo tonto, no te hagas la inocente- me quedó observando por una instante y se decidió a hablar- mírate, que grande estas.
-Lo mismo digo de ti, por poco y no te reconozco, y bien ¿dónde está mamá?
-En la cocina entra a buscarla, ayudaré a papá a traer sus cosas.
Jin paso a mi lado y fue directo a donde papá estaba, me quedé pensando, ¿enserio ese era mi hermano?, podría decir que a él le pegó muy bien la pubertad.
Me encaminé hacia dentro de la casa, miré a mí alrededor y seguía siendo la misma casa, nada más por ciertos cambios, uno que otro mueble en otro lugar y otras nuevas fotografías que adornaban de este.
-¿Esa es mi pequeña?, ¿ya no reconoces esta casa?- dijo mi madre debajo del umbral de la puerta de la cocina.
-Mamá...- alcancé a decir y salí corriendo hacia ella.
Mantuvimos ese abrazo por un buen tiempo, mientras ella me decía lo grande y bonita que estaba y que me había extrañado demasiado.
-Yo también quiero un abrazo así- dijo mi padre caminando hacia nosotras y Jin a un lado.
Me separé de mi mamá para que abrazara a papá y es lo que hizo.
-Te extrañé- le dijo mi madre a papá y se besaron.
Reí por debajo por la cara que puso Jin, ajá como que el no haya besado a alguien, o bueno no sabría.
-Vengan acá- dijo mi padre con los brazos extendidos. Y nos abrazamos, fue una especie de abrazo grupal, en este caso un abrazo familiar. Fue muy bello.
-Bien ¿quién tiene hambre?- dijo mi madre.
Y fue así como nos sentamos a comer en familia y compartimos muchas cosas de estar este tiempo separados, hasta mencionar que mis abuelos, vinieron a visitarnos, ellos ya no vivían a cuatro casas de nosotros como antes era, decidieron irse a Busan a tener una vida más tranquila así pensaban y aparte que les dieron una buena recompensa por la vieja casa en el que vivían, el chiste igual ellos estarían este fin de semana con nosotros, solo querían verme a mí y a mi padre, los adoraba mucho. Sin darnos cuenta entre risas, y momentos felices y también tristes ya era de noche, y nos dirigimos cada uno a nuestra habitación.
Estaba en mi habitación, nadie la ocupo en este tiempo, era mi cuarto de niña, me decidí a desempacar algunas cosas, y mañana me encargaría de limpiar de esta.
Me acosté dispuesta a dormir, pero antes me pasaron a desearme las buenas noches, primero mis abuelos, luego mis padres y finalmente, el tonto que más quería, Jin, sin duda tenia, la mejor familia.
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"You are the cause..."
FanfictionPor fin, de nuevo en Corea, después de tanto tiempo, una nueva vida me espera... Tenia a mi familia, y nuevos amigos, mi vida era normal, bella, perfecta, hasta, hasta que decidí dejar que ese chico entrara a mi vida, te odio, Jeon Jungkook ¿por qué...