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La siguiente historia contiene alto erotismo relacionado con temas religiosos. Si crees que es demasiado para ti o debido a tu fe no te parece correcto, no se te obliga a leer, por favor no denuncies la historia ni me juzgues. Recuerda que no todos tenemos el mismo pensar y esto es solo mero entretenimiento, nada tiene que ver con mis propias creencias o ajenas.
Todo es ficción y nada de lo relatado se asemaja a la realidad, por tanto si hay algo que no concuerda con tus conocimientos, no trates de corregirme, todo es completamente inventado.

Sin más disfruta de la lectura y espero recibir tu apoyo.💜
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- ¡Padre! - el pelinegro de 15 años corrió envuelto en su túnica blanca de testimonio dévoto, había dado un gran paso hacia el camino que sus padres le habían dicho, era el correcto. - ¡Padre espere! - el sacerdote no tan viejo ni tan joven, detuvo su andar al escuchar los gritos.

- Jungkook, ¿que sucede hijo? - preguntó el hombre sonriendo y acariciando su propia túnica

- Yo... aghh - se recargó en sus rodillas y trató de controlar su perdida respiración. - a... ¿a donde irá padre? - el hombre ayudó a Jungkook a erguirse y acarició su cabello con parsimonia.

- Voy a casa Jungkook - dijo con simpleza

- ¿a casa? Pero... pero esta es su casa padre, ¡la casa de Dios! No puede dejarla. - el hombre sonrió nuevamente

- No Jungkook, esta no es más mi casa. - el sacerdote quitó el clériman* de cuello y lo entregó al menor, quién lo tomó confundido.

- Pero... ¿por qué...?- el padre se inclino para encarar al menor

- Escucha Jungkook - puso una mano sobre su hombro - a veces tomamos deciciones equivocadas y no nos damos cuenta hasta que dentro de esa decisión cometemos errores, y entonces queremos remediarlo pero es demasiado tarde. Y para ello no existe perdón.

- Pero usted dijo que...

- Se lo que dije... y espero que tu sigas el camino que deseas, por favor no hagas lo que tus padres te dicen, haz lo que dicten tus ideales. - el menor no comprendió las palabras del que por muchos años había sido su mentor, así que solo bajó la mirada triste y acariciando el clériman obsequiado.

El sacerdote por su parte alzó la mirada más allá de Jungkook, hacia el salón de las oraciones, donde otro devoto estaba parado observando a ambos, observando la partida de su fiel seguidor, la partida de por quién había fallado a quien servía con devoción.

El sacerdote por su parte alzó la mirada más allá de Jungkook, hacia el salón de las oraciones, donde otro devoto estaba parado observando a ambos, observando la partida de su fiel seguidor, la partida de por quién había fallado a quien servía con...

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Clériman- parte blanca que usan los sacerdotes en el cuello y es desprendible.

El infierno de Dante (Butterfly)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora