14. Promesas, parques y un vestido rojo.

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  Los días habían pasado, no había llamado, no había enviado un mensaje, no había ido a la empresa, no la había visto desde aquella vez que no fuí por ella.

Lucy estaba molesta, ella tampoco me dirigía la palabra. Había pasado estos dias en la oficina, otras veces en cama, durmiendo. O si no salía correr, pero eso no ayudaba mucho. No podía olvidarla, porque no se si volvería, tenia miedo. Tenía miedo de no verla regresar.

Esa mañana me desperté temprano, dispuesto a resolverlo todo.

Baje las escaleras ya vestido, me puse hacer unos huevos revueltos que había estado practicando hacer hace días. Al terminar quedaron excelentes, yo tampoco lo creía.

Subí las escaleras hacia la habitación de Lucy, abrí lentamente la puerta y la ví allí, durmiendo como un perfecto Ángel.

Deje la bandeja en su mesa de luz y me senté en el borde la cama, y me acerque a ella.

– Buenos días– Susurre cerca de su rostro– A despertar princesa– Acaricie suavemente su cabello, haciéndola despertar.

– Papa, sal de mi habitación– Tapo su rostro con las sabanas y se alejo de mí– No quiero verte aún– Dijo.

– Pero cariño te traje algo– Sonreí atrayendo la bandeja hacia ella.

– Papa, solo vete no quiero, verte ahora– Grito dominante, yo tensé mis músculos.

– Lucy Anne Stone Bisshop– Reclamé– No quiero que me hables así.

– Solo quiero a Emma papa, solo la quiero a ella– Sollozó, es lo que había estado haciendo, había estado llorando. Me acerque a ella y lentamente le quite las sabanas de la cara, ella me miro con lágrimas en sus ojos– Por favor, haz que vuelva papa– Suplicó.

– Te lo prometo Lucy– Bese lentamente su frente y limpie sus lágrimas. Deje su desayuno junto a ella y salí, ella algo desconcertada me sonrío.

Tome las llaves de mi auto y salí, en busca de Emma.

EmmaPOV.

Estaba enroscada con las sabanas de mi cama, voltee mi vista hasta el reloj de mi mesa, 10:00 a.m y yo aun no despertaba. Me levante pesadamente de donde pense que era mi cama, pero en en realidad era el sofá de la sala, donde había tenido una intensa noche.

Mire a mi alrededor y mi casa estaba hecha un desastre, había cajas de helado por doquier. Botellas de Red-Bull tiradas por el suelo, y cajas de películas de románticas de los 70's sobre y bajo el televisor. Bien, era un departamento de una despechada. No sabia que hacer, no sabia si disculparme con el o si el debería disculparse conmigo, no sabia si llamarlo o dejarle el mensaje. En estos casos necesitaba a Kourtney, pero ella ya no contestaba mis llamadas por alguna extraña razón. Estaba cansada y frustrada, los extrañaba, extrañaba estar el día haciendo cosas con el, comprando, hablando de Lucy, en algunas ocasiones peliando. Es decir los extrañaba claro, porque no extraño a Logan, puff. En lo absoluto.

Si claro Emma–Dijo mi conciencia– Otal vez, eso es lo que quieres creer–Me reprocho.

Giré mis ojos a mis propios pensamientos y me levante a ordenar todo.

~

Genial, pase una hora completa recogiendo helado, películas y Red-Bulls, y apenas me había cambiado. Subí las escaleras y fui a lavarme los dientes y darme una ducha.

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