Mientras yo bailaba
se notaba en tu mirada
como el deseo desbordaba
los límites de la razón.
Sin separar ni un momento la vista.
Te uniste a mis movimientos
y juntos bailamos
y nuestros corazones se unieron.
Tú decidiste,
volverte a sentar,
Mientras yo me soltaba,
y bailaba cada vez más.
En serio,
Cariño,
No tienes la menor idea
de lo mucho que te aprecio,
de lo mucho que te quiero.
De lo mucho,
de lo mucho que te deseo.
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Crónicas Escorpianas
Poesía¿Qué cómo describiría este libro?, en su mayoría, poemas en los que explico sentimientos, donde se ven evoluciones a veces más felices, a veces más tristes. Obstáculos que nos provee la vida, porque ella es así de impredecible. Días confusos, donde...