Scalia || Sure thing

2.

Narra Malia.
Esto de ser humana me estaba empezando a gustar un poco más, ya tenía amigos y.. Creo que algo más, no se que era lo que tenía con Stiles, pero me gustaba. El estaba con Lydia en México ahora, fueron primeros y ahora estamos yendo Scott, Kira y yo. Todos fuimos en busca de Derek Hale, según Stiles, Derek alias el gruñón Hale.
Después de unas horas llegamos y fuimos a una fiesta donde abajo estaban los cazadores y Lydia y Stiles. Yo estaba medio bailando, Scott sentando en uno de los sillones y Kira en otro. Scott y yo tratamos de escuchar.
—¿Trajeron a un lobo en mi casa?— Escucho decir a una vieja y por la cara de Scott también esta escuchando.
—No, un alfa.— Se escucha a Stiles y Scott pone sus ojos rojos, yo los de coyote y Kira lo de zorra.
Pierdo a Scott y Kira viene conmigo.
—¿Y ahora que hacemos?
—Mezclarnos.— Le digo bailando un poco y ella me mira.— Baila conmigo, tonta.
Ella asiente y empieza a bailar medio raro. Yo río levemente y niego. La tomo de la cintura y bailo con ella muy cerca, tan cerca que puedo sentir su respiración en mi oreja. Yo suspiro y bailamos, la gente empieza a acercarse. Vemos que dos de la gente son los cazadores y Kira agarra a una y yo al otro, los tiramos al piso y la gente no entiende nada.
Scott nos mira y nos vamos por un pasillo, veo que Scott se cae y Kira lo mira con preocupación, veo para arriba y hay humo.
—¡Aconito! —Escucho gritar a Scott y también me caigo yo. Ambos tosemos y viene una vieja, la misma vieja que escuché con Stiles.
—Alguien que lleva siendo alfa un par de meses debería tener más cuidado que lleva 40 años siendo cazador.—
De repente estamos en otra habitación encerrados Kira, Stiles, Scott y yo. Aunque, Scott desmayado, Kira parece preocupada y admito que me estoy preocupando yo.
—¡Desperto! ¡Chicos esta bien! —Grita Kira y nos acercamos a intentar sentar a Scott.
—No tienen a Derek.
—Lo sabemos, pero ahora tienen a Lydia.
—¿Lydia? ¿Que quieren con Lydia?— Pregunta Scott alterado y yo los miro sin entender.

Narra Scott.
Veo como tienen a Lydia y ella tiene los ojos llorosos, yo estoy atado a una silla y puedo sentir la electricidad.
—¡Alguien pudo haberse convertido sin que nadie se diera cuenta! ¡Alguien! Dime quién.
—¡No lo se! —Grito y se me viene la imagen de Kate y Argent hablando. Imposible. Gruño y me saco las cosas estas.
—¡Dime el nombre!
—Kate Argent.

Narra Malia.
Mientras tenían a Scott estaba con Stiles, tratando de escuchar lo que decían, pero no podía. Hay muchas voces.
—No puedo, escucho muchas.. Voces.
—Okey, solo concéntrate en mi voz, si? No escuches a los demás, concéntrate en mi vo..— No lo dejo terminar y lo beso, me gustan sus labios, son perfectos. Aunque me gustaría besar a Scott. ¿Qué?.
Se me ponen los ojos azules y lo miro.
—Kate Argent.
—No puede ser, imposible.
—¿Por que? ¿Quien es Kate?
—Una... Cazadora.
Logramos salir de ahí después de eso y Arya, la vieja, nos manda a una merciaria para encontrar a Derek más fácil. La seguimos con el jeep de Stiles y suspiro.
—Bien, me pueden decir quien es Kate Argent?
—Era.. La tía de Allison.
—Y una completa sociópata.— Miro a Lydia y los vuelvo a mirar.— Pero nosotros vimos el cuerpo.
—Vimos el cajón, no el cuerpo.
Algo choca el jeep y.. Braeden? Frena, nos quedamos Lydia, Kira, Stiles y yo arreglando el Jeep.
Ya se hace de noche, y Stiles sigue arreglando el jeep. Cuando Kira y Scott se despedían sentí algo en mi estómago, no me gustaba. Negué con la cabeza restandole importancia y suspire.
—Puedes ver algo?— Me pregunta Kira y yo niego con la cabeza.
—Debimos haber traído más linternas.
Kira hace algo con su espada y yo lo veo, gruño y voy corriendo, siento la voz de Stiles llamándome y corro igual.
Después de sentir el corte vuelvo a la normalidad, veo a Kira y casi me mata con la espada.
—Soy yo! Soy yo!— Río leve y nos vamos de nuevo al jeep de Stiles.

Narra Stiles.
Después de lo de hoy se que no podría estar sin Malia, tenía miedo que me dejara y nunca más saber de ella.
—Tu, tu no vuelvas a hacer eso nunca más.
—Hacer que? — Siento la mirada de Malia mientras manejo
—Crei que estabas corriendo.
—Estaba corriendo.
—No, no, que estabas huyendo.
—Nunca me iría sin ti.— Siento algo dn mi estómago y sonrio mirandola.— No, nunca me iría sin ti.
Después de unos minutos llegamos a la Iglesia y están Braeden y Scott.
—¿Encontraron a Derek?— Pregunta Malia.
—Si. Es él.