I N F I C I - MINAYEON

Viginti

Nayeon POV

"¿Qué demonios estás haciendo?" Mina siseó. "Nos van a ver". Estaba claramente molesta, pero realmente no me importaba en este momento. Porque conocía a esas personas que estaban varadas en medio del camino.

"Esa es mi hermana", le dije en voz baja, solo para que apenas sea audible para Mina.

Tan tranquila como estaba, sé que me escuchó porque su expresión facial cambió de frustración a comprensión y luego rápidamente al pánico.

Solo se quedó allí por un minuto, pensando en un plan para, con suerte, poder salvar a Sana y sus amigas.

Me entregó su navaja militar, que estaba pegajosa con la sangre del hombre que apuñaló en la parte posterior de la cabeza antes.

Lo tomo y hago una mueca ante la sensación de sangre cálida y pegajosa que cubría el mango. Limpié el extremo del mango con una hoja que encontré en el suelo. Todavía es pegajoso, pero al menos ya no es tan notable.

"Si tienes que matar a uno de los infectados", explicó, "apunta a su cabeza y SOLAMENTE a su cabeza. De lo contrario, seguirán atacando". Tenía una mirada de compasión y miedo en sus ojos mientras me explicaba qué hacer. "¿Entendido?" Ella pregunta, después de que me nota callada y solo mirándola.

"Sí, lo entiendo. Apunta a la cabeza". Repito.

Me da una pequeña sonrisa y duda por un minuto antes de volver a hablar, casi como si quisiera hacer algo pero tiene miedo de hacerlo.

"Está bien, así que aquí está el plan", comenzó a explicar "Voy a volver corriendo al camión y atraer a los infectados lejos de tu hermana y sus amigas. Mientras tanto, estarás dentro de esta casa esperando a los infectados distraerse. Cuando crees que es el momento adecuado, encuentras alguna forma de llamar la atención de tu hermana y traerla a la casa de forma segura. Cuando termine de perder a los infectados, volveré por ustedes. ¿De acuerdo? " Esperó mi respuesta.

"¿Entonces me vas a dejar?" Pregunto en pánico. "¿Qué pasa si me pasa algo?" Me detengo por un segundo "¿O a ti?" La idea de perder a Mina en este momento me mataba. He desarrollado sentimientos por ella, si desapareciera repentinamente de mi vida, no sé cómo, o si sería capaz de lidiar con eso.

Me miró con tristeza a los ojos "Si quieres que tu hermana vuelva, así es como debe ser". Dijo solemnemente. "Prometo que no te pasará nada a ti ni a mí". Dijo con una hermosa sonrisa en su rostro.

Solo le sonrío a cambio y asiento con la cabeza levemente, antes de que me llevara a la puerta trasera de la casa en la que nos ocultábamos.

Mina entró rápidamente, ya que eran puertas de vidrio, y las abrió.

Por suerte para nosotras, están desbloqueadas.

Rápidamente me invita a entrar y cierra la puerta en silencio detrás de ella. "Quédate aquí." Me ordena mientras comienza a recorrer todas las habitaciones de abajo.

No lleva tanto tiempo, ya que las casas por aquí no son muy grandes, por lo que no hay mucho que explorar.

"Está bien, todo está despejado". Afirma mientras regresa a la sala de estar, donde todavía estoy de pie obedientemente junto a las puertas corredizas de vidrio.

"¿Recuerdas lo que dije sobre apuntar a la cabeza?" Ella pregunta, y yo asentí en respuesta. "Bien. Solo recuerda esperar para exponerte después de haber distraído a todos los infectados". Me recuerda.

"Lo sé", digo con tristeza. "Recuerdo."

Ella debe haber notado la tristeza en mi voz porque inmediatamente me miró con ojos tranquilizadores, se acercó a mí y me envolvió en un gran abrazo cálido, envolviendo sus manos alrededor de mi cintura delgada. A cambio, envuelvo mis brazos alrededor de su cuello y nos quedamos así por unos buenos segundos antes de que, a regañadientes, nos separamos la una de la otra. Sin embargo, todavía mantenía sus manos alrededor de mi cintura y mis manos aún estaban sueltas alrededor de su cuello.