「ᴀᴍᴏʀ ᴀ ᴘʀɪᴍᴇʀᴀ ᴠɪsᴛᴀ」|•| 「ʜᴡᴀɴɢ ʜʏᴜɴᴊɪɴ」

12-Amor Verdadero

–¿A quién le crees?

–Pues –baja la mirada–

–¿Te vas a quedar callado? –lo miro–

–¿Traes el café? –mira la bolsa cambiando de tema–

–Hyunjin, no me cambies el tema –cruzo mis brazos–

–Te creo a ti, Christina –baja su mirada–

–Júramelo –me acerco a él–

–Te lo juro –me mira con cara de cachorrito–

–¿Por qué desconfías de mí? –suspiro–

–Lo lamento –dice muy tierno–

–Bien –lo miro, me dirijo a la cocina con la bolsa de cafés y va detrás de mí, arrastrando sus pies–

–De verdad lo siento, amor –suspira rendido–

–Un lo siento no va a solucionar la estúpida pelea que acabamos de tener –pongo la bolsa sobre la barra–

–Vamos, bebé –se acerca a mí y de espaldas me toma por la cintura– Perdóname, ¿si? –lleva su respiración a mi cuello–

–Quítate, Hyunjin. No vas a solucionar nada haciendo eso

–Bueno –me arrima más a su cuerpo– ¿Segura que no? –comienza a besar mi cuello–

–Muy segura –el que haga eso, hace que sienta escalofríos por todo mi cuerpo–

–Entonces, ¿esto tampoco? –de un movimiento hace que gire, quedando frente a frente y despacio se acerca a mis labios– ¿Sigues muy segura? –susurra sobre los nombrados–

–Demasiado –miro sus labios–

–No me dejas otra opción –me carga, colocándome sobre la barra y acaricia mi pierna lentamente– ¿Aún muy segura–

Asiento con la cabeza, pero por dentro tenía demasiadas ganas de lanzarme a sus labios. Cuando los contrarios rozan con los míos, ninguno de los dos se resiste más y los unimos, comenzando a besarnos muy apasionadamente. Joder, así no me puedo hacer la difícil. Siento como sonríe entre el beso, me levanta y nos dirigimos al sofá

–Sabía que te terminaría haciendo mía –ríe–

Horas más tardes

–Pensé que no vendrías –Chanyeol sonríe, mientras me acerco a él–

–Estaba haciendo unas cosas –sonrío y me pongo el mandil–

–Eres la única de aquí que le queda bien el uniforme –sonríe tímidamente–

–Gracias –lo miro–

–Voy a atender aquella mesa –la mira–

–Muy bien, iré a la de atrás –ambos nos vamos–

En la noche

–¿Ya te vas a ir? –se acerca a mí–

–Si, es que quiero ir a ver a una amiga –sonrío leve–

–¿No quieres que te acompañe? –pensé en la pelea de la mañana, así que sería mejor negarlo–

–No te lo tomes a mal, pero, prefiero ir sola –sonrío–

–¿Es por tu novio? –pudo leer mi mente de alguna manera–