Capítulo 12:

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- Últimamente caminas con mal humor ¿Qué sucede cariño?-pregunto con cautela Romina mientras le pasaba a Cleo un batido fitness.

- Eso es porque desde que Kate salió del closet las cosas en mi casa se han vuelto más insoportables-Cleo tomo un gran sorbo del batido, seguido hiso una expresión de puro asco.

- ¿Kate? Ese nuevo nombre de tu hermano-Romina evito que Cleo botara el vaso con el batido.

- Ya no podemos llamarlo como el, ahora es una ella, mi madre se ha tomado este asunto muy en serio-Cleo con asco empezó a tomar pequeños sorbos del batido, en tiempos prolongados para no sentir su mal sabor- es increíble que la misma mujer que me ha criticado mi forma de maquillar alabe la forma ridícula con la que se maquilla Kate-

- ¿Es tan malo?-

- Dime tu ¿Quién carajos combina morado con amarillo?-

-¡Sacrilegio!-

- ¡lo sé!- bufo volviendo a hacer una mueca- talvez funciones para ir a un carnaval ¿Pero para ir a una clase en la universidad? Además ya me tiene harta que pasa roban ropa mía, ¡Ella ya trabaja que compre su propia ropa! He tenido que cambiar la cerradura de mi cuarto y ponerle otras cerraduras extras a mi ropero-

- Han sido dos semanas estresantes-Romina tomo todo lo que quedaba de su batido en un solo trago- pero tengo la solución-

- A este punto aceptaría todo lo que dijeras, si me dices que un viaje a un volcán me va relajar en dos horas estoy empacando-

- No seas tan drástica amiga, pero estaba pensando en ir a un parque de diversiones-

- ¿Tu y yo? Suena bien-

- ¿Y qué tal si agregamos a dos más a la ecuación?-las cejas de Romina se movían de arriba había abajo en tono sugerente. Mientras que Cleo la miraba con una ceja alzada como si estuviera loca- vamos cariño, lo tuyo con Asher se ha enfriado demasiado, ponle un poco de sazón cariño-

- lo dices como si estuviéramos en una relación amorosa-

- ¿No? Juraba que si-

- Bueno, todavía no-

- ¡Ves!-Cleo tuvo que agarrarse de la mesa para no caer debido a Romina- Es la oportunidad perfecta para que te olvides de tu hermano/a y hagas una jugada con el-

- ¿Y quién sería el cuarto en ir?-

- Elliott, por supuesto-

- ¿Sabes? Creí por un momento que jugabas con el chico, pero por lo que veo vas en serio con el-

- Si, al principio esa era la intención, pero él ha sido tan dulce conmigo y tan diferente a otros chicos, me ha ganado-

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Cleo se lo estaba pensando mucho para usar la escalera para alcanzar el libro. Aunque ella era lo suficientemente alta, necesitaba una persona de tres metros para alcanzar el dichoso libro.

A quien rayos se le había ocurrido hacer las estanterías tan altas.

Y no es que Cleo tuviera miedo de usar la escalera y caer. La raíz del todo el problema era que Cleo levaba uno de los pantalones más pegados de su armario, si subiera por la escalera cualquiera que pase cerca tendrá una espectacular vista de su parte trasera.

En este tipo de situaciones los complejos de su cuerpo volvían, sabía que tenía una retaguardia un poco más grande de lo normal y con la que muy a menudo no se sentía cómoda. En especial cuando hacían comentarios morbosos (incluso las chicas hacían comentarios) de su cuerpo, aunque los soportaba le incomodaban demasiado.

No te guies de las AparienciasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora