Atrapado |KIRIBAKU

#O3

Era bastante obvia la respuesta de los análisis que les tomó después de todo, aun así, era algo que se necesitaba para que Aizawa pudiera tomar cartas en el asunto.

El azabache salió de la oficina de su director queriendo dormir, después de una corta reunión con algunos profesores más sobre este caso se le designó el cuidado de los dos nuevos adultos, por lo menos hasta que el quirk pasase de su tiempo límite. Hablaron de muchas cosas respecto a los koseis y también se le dio la responsabilidad de tomar nota a los posibles cambios que los chicos pudieran tener.

La verdad no tuvieron que pensarlo mucho para tomar una decisión, pues cuando Erased Head habló a solas con ambos mayores le contaron cosas bastante curiosas.

Ellos en algún tiempo de su pasado estudiando en la UA habían recibido las vistas de sus "yo" adultos por una semana completa, hasta que desaparecieron eventualmente.

Bakugou parecía ser quien más recordaba entre ellos dos, pues empezó a contarle casi con detalle lo que pasaría en cada día hasta el último, como si lo hubiera vivido hace poco. Aquello le trajo mucha información necesaria, si lo que decían era cierto solo tenían que esperar el tiempo justo para que todo volviera a la normalidad. Era agradable ver que en realidad no estaban lejos de la solución más sencilla.

Analizándolos bien pudo darse cuenta de los cambios que sus alumnos tendrían, muy lejos de cómo actuaba en batalla, Bakugou se había vuelto sereno y menos impulsivo, ahora se tomaba el tiempo de pensar bien lo que decía y exponer sus puntos de vista bastante concretos y de manera inteligente, Kirishima en cambio seguía con esa personalidad deslumbrante que poseía, pero con unos aires de madurez que daban ganas de hacerle barras con cualquier tontería que dijera, pues sonaba correcta e inspiradora.

Era sorpresivo y gratificante ver sus cambios para bien, aunque lo que verdaderamente lo dejó casi con la boca abierta sobre ellos fue la directa declaración de que eran pareja, peor aún, pues le dijeron que eran casados. Aizawa creyó al inicio que era una broma de mal gusto, pero al ver la seriedad en el mirar de ambos decidió archivarlo como un pequeño dato extra, para discutir sobre alguna habitación compartida cuando le tocase hablar con el director sobre su estadía. Era su culpa, él les dijo claramente que no ocultaran nada y bueno, al parecer ellos eran sinceros.

El héroe realmente quería llevarlos a la reunión pero antes tenía que hacerles los exámenes correspondientes, por lo que lastimosamente tuvo que dejarlos y enfrentarse solo al problema.

Se habló un poco también de la mínima posibilidad de algún tipo de permanencia, pero aquello fue descartado rápido, pues no era posible que un kosei de aquella magnitud fuera irreversible. Después de todo no era algún tipo de viaje futurista o algo así, ellos tan solo fueron enviados por algún quirk transrealidad y los enviaron ahí —la teoría más aprobada—, por lo que podían estar tranquilos.

Aizawa dio grandes pasos para llegar rápido a la enfermería, en donde se suponía que estaban los cuatro chicos... ¿Conociéndose? Bueno, era algo raro de definir ya que literalmente estaban hablando consigo mismos.

Mucho para pensar, se dijo para sí lo suficientemente cansado de todos los problemas que sus alumnos le daban como para tirarse de una ventana si alguien se lo pedía. O era Midoriya rompiéndose algo, o era Kirishima incumpliendo las reglas o Bakugou mismo por su personalidad explosiva. Aunque ahora se habían pasado y lo que le traía problemas era una versión adulta de los dos últimos.

No le pagaban lo suficiente para meterse en eso.

Llegó hasta la sala en dónde había los había dejado y se encontró con los cuatro charlando de lo más tranquilos, o por lo menos eran los dos Kirishima preguntándose cosas mientras los rubios intervenían de vez en cuando.