PARENTING ❀ jinsu

3

Para la buena o tal vez, mala suerte de Kihyun y Minhyuk, los mellizos se quedaron dormidos una vez dieron vuelta a la esquina con dirección a su casa. Unos cuantos días antes Jin había adaptado las sillas para el auto de ambos bebés. Al llegar a casa, Kihyuen fue el encargado de armar la cuna portátil en la cual dormirían durante su estancia. Minhyuk se quedó sentado en la cama, cuidando que ningún bebe rodara fuera de esta y saliese herido. Porque si uno de ellos resultaba con un daño, sabia que Yoongi le haría sufrir quince veces más.

"¿Ya casi?" preguntó el omega adormilado, viendo como su alfa no tenía ni la mitad de la cuna armada.

Veinte largos minutos después para Minhyuk, todos ya estaban en su lugar correcto para dormir. Al ser una pareja sin hijos, su departamento es reducido, solo contaban con una recamara, así que los mellizos dormirían junto con ellos, además de que era más precavido así por cualquier cosa que pasara.

Minhyuk en verdad se preocupada por su integridad física y emocional. Así que debía cuidar a los niños perfectamente y entregárselos justo como se los dieron a sus padres.

Sin embargo, ninguno sabía que tan temprano unos bebés de casi dos años se podrían despertar. Jimin fue el primero, parándose en sus dos piernas rellenitas, dando pequeños brincos, emocionado al ver a sus dos tíos dormidos, ¡eso significaba que seguían de paseo! A diferencia de Taehyung, quien amaneció con un por lo molesto que estaba siendo su mellizo con todo el alboroto. El rubio lo sintió despertar, y entre balbuceos le hizo entender a Tae que debía pararse para ver donde estaban. Con mucha dificultad, el castaño lo hizo y su puchero se hizo más severo.

"¡Mami!" sollozó Taehyung al darse cuenta que ninguna de las dos personas en la cama era su madre.

Jimin también hizo un puchero al notar a su mellizo llorar.

"¿Mami?" preguntó extrañado.

Minhyuk despertó por el lloriqueo de Taehyung. Jimin le miró con los ojos brillantes de diversión, abriendo y cerrando sus manitas para que lo sacaran de ahí. A ambos bebés les gustaba pasar el día en brazos de su mamá o sentados en la alfombra jugando entre sí. El omega tomó al rubio bebé, besándole la cabeza antes de dejarlo sobre el suelo, comenzó a gatear, explorando el lugar. Tenían suerte que su tío Kihyun fuese un obseso de la limpieza, así no corrían ningún peligro de encontrarse con suciedad o algo que pudiesen llevarse a la boca. A diferencia de Jimin, Tae hizo un berrinche cuando su tío omega estuvo a punto dejarle en el suelo, encogió sus piernitas para evitar tocar el piso, el quería ser abrazado por más tiempo.

Sin más que hacer, Min se sentó con el castañito en brazos para acompañar a Jimin, quien no tardo en acercarse y convencer a su mellizo de bajar a jugar. Por su parte, el castaño mayor tomó una pantufla y se la lanzó a su alfa, cayendo esta justo en su rostro.

"¡Tranquilo, Yoongi, tus hijos están perfectos!" Kihyun dijo despertando asustado.

"Haz el desayuno, alfa flojo" el omega le dijo, lazándole la segunda pantufla.

La mañana fue tranquila, los bebés no causaron demasiado problema en sí. Taehyung se mantenía mimoso, queriendo ser abrazado y cargado la mayoría del tiempo, tampoco es como que Minhyuk se quejara, era un bebé muy lindo y jamás se quejaría de tenerle en brazos. Antes de tomar su siesta, estaban tomando su biberón para dormir más relajados. Minhyuk observó Tae, le acarició el cabello suavemente, llevándolo fuera de sus ojitos cafés. Kihyun tenía a Jimin al parecer ya dormido en su regazo. El mellizo menor dejó de tomar de su biberón observando a su tío para después sonreír.

"Mami" soltó, volviendo a tomar de su leche calentita.

"Aww, ¿oíste eso, Kiki? ¡me ha llamado mami!" dijo el omega, sonriente.