" Los puntos negros"

"En cada aleteo, vi un segundo de mi existencia.."

Las ventanas se han abierto con vigor.

_ Debieron de haber quedado mal cerradas anoche -dijo-

Se dirigió al cuarto a buscar a su esposo y lo encontró tirado cerca de la puerta, pero blanco, como escarcha de julio, con los ojos entrecerrados, observando a lo lejos el horizonte.

_ ¿Qué te ha pasado? _preguntó_

El hombre, haciendo un esfuerzo levanto el dedo índice, hacia el lugar donde una rama enorme, que antes había sido el hogar de dos loros barranqueros, despedía algunas plumas de un verde esmeralda que levitando sobre la brisa de la mañana, iban a parar lentamente al suelo de entrepiso.

_ Se marcharon, Félida, escuche sus alas agitarse cerca del patio y corrí a ver, pero a mitad del camino la fatiga me venció y comencé a debilitarme. A lo lejos se podían ver dos aves revoloteando cerca de una palmera.

_Quizás hayan olvidado como es vivir en el monte y vuelvan, dijo la mujer, mientras le invitaba con un mate entre verde y perlado por una pequeña espuma que se formaba entre la bombilla y el hueco, pero para su sorpresa, la infusión, dio contra el suelo antes de que dos puntitos negros se perdieran en la inmensidad del cielo.