Sebastian Stan

514 28 12
                                    

                               17-. Surprise

Realmente el haberme venido a trabajar a otro país no fue muy bueno que digamos. No digo que sea completamente malo, sólo que extraño demasiado a Sebastian. Siempre me llama cuando termina de grabar, pero no es lo mismo verlo en una pantalla, que tenerlo junto a mi.

—_____ —Me habló la chica que era secretaria de mi jefe—. Will te necesita en su oficina —Dijo con una sonrisa.

—Iré enseguida, gracias —Con un asentimiento de cabeza salió del lugar.

Cansada de absolutamente todo, tome mi carpeta junto a mi celular y salí de mi oficina en dirección a la de mi jefe. Realmente no tenia ni la más mínima idea de porque me llamaba, según yo los detalles del último caso ya estaban resueltos.

Ya frente a su oficina di pequeños golpes en su puerta.

—¡Adelante!

—¿Requerías de mi increíble presencia? —Entre cerrando la puerta a mis espaldas y sentándome frente a él.

—Pues si —Dejó de teclear en su computadora para verme fijamente—. Puedes tomarte el día libre —Dijo tirándose hacia atrás en su silla.

Espera, ¿que?

¿Realmente este era el Will de siempre?

—¿Estas seguro? —El asintió—. Porque mi turno termina a las nueve y son las cuatro.

—Como te dije, tomate lo que queda de día —Yo sonreí bastante intrigada en su dirección—. Y si quieres te puedes tomar el día libre mañana —Dijo situándose a mi lado.

Yo me paré de mi asiento, con una sonrisa aturdida en mi rostro. Todavía estaba un poco en shook con lo que me había dicho Will, ya que él nunca hace eso. Will es uno de esos jefes que es de temer.

—Okey, se lo agradezco mucho —Este me estrechó la mano y me abrió la puerta para irme.

Di un largo suspiro y me dirigí de vuelta a mi oficina a buscar mis cosas. Mientras abría la puerta de esta y empezaba a ordenar mis cosas me puse a pensar que Sebastian no me había llamado, lo cual era bastante raro, ya que hoy era su día libre de grabaciones. Siempre me llamaba a la hora de almuerzo, pero esta vez no recibí ni un mensaje de su parte.

Me subí en el ascensor esperando a llegar al subterráneo, ya en este me subí en mi auto y me dirigí a la salida. Realmente manejar en Inglaterra había sido todo un reto para mi, ya que todo era hacia el otro lado.

Mientras iba manejando, en una luz roja marqué el número de mi novio y puse el altavoz. Después de tres tonos respondió.

—Hey, amor ¿que tal tu día? —Saludó Sebastian, bastante animado.

—Bien amor, ¿y el tuyo? —Pregunte de vuelta.

—Muy bien a decir verdad, ¿a que hora llegas del trabajo?

—Raramente hoy, mi jefe me dejó salir antes, así que estoy llegando hacia mi departamento.

—Me alegro que Will se haya apiadado de ti —Dijo riendo, contagiándome a mi también—. Okey muñeca, tengo que cortar —Dijo triste.

—Okey —Suspire, por lo menos había podido escuchar su voz—. Te amo, cuídate.

—Yo te amo mucho más —Nos despedimos y corte.

Llegue a la entrada del subterráneo de mi edificio, pero me llevé con la sorpresa de que había un auto estacionado en mi estacionamiento habitual. Confusa me estacioné en otro cubículo.

One-Shots; Loki Laufeyson/Bucky BarnesWhere stories live. Discover now