FIN

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Agni jadea, agotado y más allá de cualquier raciocinio, Elio a su espalda con sus manos ancladas en las caderas sigue y sigue, embistiendo en lo más profundo de su cuerpo, están en la cuarta ronda y Elio continúa atacando su cuerpo con gran necesidad de sentirse su dueño, de poseerlo por entero.

Agni, gira la cabeza para encontrarse con la ardiente mirada de ese dios tan blanco que impasible mueve sus caderas a una velocidad constante, el sudor se desliza de su frente y se inclina para besar e invadir la dulce boca, que también cae sumisa ante su ataque.

-Así, un poco más amor, deja que te llene de nuevo. -Va marcando la espalda con sus dientes, un castigo inconsciente por el dolor que le ha hecho pasar su dulce marido. -Ohhh Diooossssss...siiiiiiiiiiiii...córrete, como me aprietas.

El esfínter le aprieta haciendo que también se libere y tras un grito de satisfacción se deja caer sobre Agni, abrazado a su cuerpo mientras va dejando más marcas de besos por el cuello y espalda del tembloroso chico.

- ¿Cómo estás? -Se separó un poco y tras salir del pequeño canal, le hace voltearse para completar el agotado rostro.

-Aún me siento como si siguieras haciéndome el amor, me duele todo. -Sonríe tímido mientras le besa con suavidad. -Me siento feliz y colmado de ti.

-Que lujurioso me has salido, descansemos un poco y luego te ayudo a asearte. -Le abraza mientras reparte suaves besos por todo su rostro. -No vamos a abandonar la cama, traeré para ti la comida o bebida que necesites.

-Solo te necesito a ti, no dejes de abrazarme, pensé que nunca más te tendría así, no pensé que me amaras tanto como yo a ti.

-Eres lo más maravilloso que me pasó nunca, te cuidaré y protegeré por siempre. Ya verás lo feliz que seremos de ahora en adelante.




Ha llegado y pasado su primer aniversario de bodas, otra vez solos y aislados en la acogedora casa mientras un gran manto blanco lo rodea todo. Los dos desnudos, sus manos perdiéndose en el cuerpo del otro, regalándose algún que otro beso, intentan calmar sus respiraciones y enloquecidos corazones tras dos horas y pico de muestras de afecto.

-Estaba pensando, que tu abuela es muy lista, no se le escapa nada.

- ¿Por qué piensas en mi abuela en un momento como este?

-Estaba pensando lo mucho que te amo y recordé cuando le quisiste decir a Clara de nuestra relación. -Suelta una carcajada. -"Cariño no te pongas tan colorado, no es tan difícil de decir, Elio y tú son pareja" -Intentó imitar la voz.

-No te ría de mí, a ti fue a quien se le quedó la boca abierta y tartamudeo disculpándose.

-Lo bueno de todo es que ella estaba muy contenta de verte feliz y no se opone a nuestro amor.

-A mí me dio pena cuando fuimos a la boda de Sandra, me dijo que le hubiera gustado haber podido estar en la nuestra. -Se arrimó a Elio y le propinó una pequeña mordida en el rosado pezón. -Menos mal que no se enfadó.

-Es muy comprensiva, por cierto, mi abogado ya dejo todo el papeleo arreglado, ya no tienes relación con ese cerdo cabrón.

-Menos mal, solo te necesito a ti y a mi abuela. -Se recuesta sobre el ardiente cuerpo de Elio para recrearse en un profundo beso que les deja jadeando a los dos. -Si estás conmigo soy feliz y capaz de todo.

- ¿Capaz de todo? -Le agarra las nalgas separándolas levemente. -Entonces deja que te haga mío de nuevo.

-Ohhhhhh...más suave, penetra con cuidado, llevas horas dentro de mí.

-Tus besos me encienden, nunca tengo suficiente de ti.

Sus labios le degustan con deliberada lentitud, mientras se entierra una y otra vez, disfrutando de los leves gemidos y sus miradas llenas de amor, se pierden en el placer de sus cuerpos.


FIN

continua >>>

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Espero hayan disfrutado de esta pareja, ya saben cualquier cosa que quieran compartir estaré encantada de leer y contestar sus comentarios.

Un saludo muy afectuoso, espero que puedan llevar estos momentos tan duros y difíciles de la mejor manera posible.

Hasta pronto y ya nos vamos leyendo.

Si estás conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora