El alpha.

un lindo reencuentro y un triste lamento

Narra Astrid: estaba patrullando la zona con Tormenta, mi loba mestiza, cuando siento que pisadas se aproximan hacia mi, nos escondemos rápidamente detrás de un árbol y veo a quienes menos quería ver, eran mis padres, pero que hacían acá?! Trague saliva y veo que se arrodillan frente mi placa

María: Oh hija, no sabes cuánto te extraño, no se porque o como moriste... O si escapaste sin más... Fui una terrible madre, y una terrible persona al presionarte tanto por lo que paso en el pasado...

José: no te culpes, se que ella nos perdonaría - dijo abrazando a mi madre, y no se equivocaba, los perdonaba,por todo. Baje de Tormenta y camine hacia ellos

Astrid: si los perdono padres - dije sonriendoles, ellos voltearon súbitamente asombrados y asustados, les sonreí mientras me acercaba a ellos y los abraze - padre, madre, los amo, deben seguir sin mi, yo estoy bien allá arriba - dije derramando lágrimas mientras los abrazaba, me tendría que hacer el espíritu de una muerta para que no me obligen a volver - no se echen más la culpa, soy feliz, pero... Me duele que se echen la culpa por algo que no hicieron, se que me aman, yo los amo, ahora sigan sin mi - dije sonriendoles mientras se ponían a llorar, esto me dolía, me aferre a ellos antes de golpearles para que se quedarán desmayados - ya puedes salir Tormenta - dije mientras limpiaba mis lágrimas, ella se acercó y se restrego contra mi - lo sé, yo también te quiero - dije mientras me subía a su lomo y me dirigía a dónde estaba mi manada. Sonreí al pensar eso mi manada dios, se sentía bien tener una, no es la mejor, es algo grande y un poco loca pero... Eso no significa que sea mala.

Narra Manthos:

Era de noche, Astrid y yo habíamos regresado del patrullaje, está noche me tocaba a mí el patrullaje de noche junto a otros lobos, salí del área donde estábamos y me adentre al bosque, ya que estábamos en una cala, una hora después veo las luces de la aldea, sonreí nostálgico, mi infancia y parte de la adolescencia la pasé en esa aldea, junto con Hippo y un poco Astrid, ví que no había guardias como antes, no me sorprendía, nos llevamos todos los lobos por lo que ya no debían tener problemas por eso. Recorría las silenciosas calles montado en Beily, si lo se, que inteligente de mi parte entrar con un lobo a una aldea mata lobos.
Deje a Beily en un lugar oscuro y poco concurrido y camine solo por las calles desoladas, obviamente con la capucha puesta, en eso ví mi cabaña, suspire nostálgico y entre por la ventana, ví que todo estaba intacto, mis libros, mi ropa, hasta mi osito Teddy! Pensaba que lo había perdido, ví que mi cama estaba intacta, toda desordenada justo como lo deje ese día. Luego me dirigí a la habitación de mis padres, todo igual, el olor a perfume de mi madre todavía se olía, algunas imágenes donde estaba ellos y yo de bebé, tomé una foto y me la guarde en el bolsillo de la chaqueta, estaba por irme cuando alguien entro a la casa, trague saliva. Me escondí dentro del placar. Vi a ¿¡Estoico?! Que hace el aquí?! Se sentó en la cama de mis padres y suspiro

Estoico: hola Helen y Mark... Como van las cosas hay arriba? Ya se encontraron con Manthos? - dijo nostálgico - espero que si, sabes? Lo lamento, no cumplí su promesa, no protegí a Manthos, se que les prometí antes de que murieran que lo protegeria y le daría lo que ustedes ya no podrían darle, pero falle, el trabajo de jefe no me dió tiempo de ver lo que el... Lo que ellos necesitaban, estoy seguro que me habrían dado una paliza por haber descuidado tanto a Manthos... Y... A Hippo si... Saben que el... El... Agh, se que no murió... Pero... Estaba tan enojado ese día que simplemente no lo quise escuchar, fue el peor error, pensé que volvería a duplicar perdón... Lo espere... Un día... Dos días... Y Patán y Bocon me empezaron a exigir respuestas por la falta de Hippo y Manthos, los dos preocupados por su ausencia, y la aldea también lo noto y exigieron respuestas... y... Entre en pánico sabes? No sabía que responder, a Hippo lo exilie y lo más seguro es que Manthos se lo haya comido un lobo, dios! Me matarían y me quedaría sin orgullo, por lo que hice inútiles busquedas para buscar a ellos dos y a una la niña pelirubia que también se había ido, no encontraron nada, los dimos... No... Les di por muertos... Y... Ahg, lo siento - dijo mientras soltaba lágrimas y se levantaba de la cama para irse, yo miré todo con lágrimas

Manthos: te perdono...