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El restaurante de HeeJin puede que no sea de 5 estrellas - o de 4 incluso - pero le gusta mucho mantenerlo limpio y organizando, las paredes se pintan cada vez que HeeJin encuentra la más mínima grieta o mancha en estas, la tienda también cuenta con un considerable número de clientes habituales. Dejando de lado todo esto, HeeJin es la mejor jefa que KimLip alguna vez ha tenido.

HeeJin se asegura de que todas sus empleadas coman bien antes de empezar sus respectivos turnos, también les paga un poco más las noches que el restaurante está lleno y logran dar el mejor servicio que puedan, HeeJin entiende cuándo no pueden venir a trabajar por el motivo que sea, y no necesita muchas explicaciones cuando solicitan una noche libre, porque ella confía en (como le gusta llamarles) sus niñas. Es por eso que todas las que trabajan ahí piensan que HeeJin es un ángel disfrazado de humano.

Por lo general, el restaurante está llenos los sábados, la cocina se convierte en una zona de guerra cuando Olivia, Yeojin y Hyunjin intentan preparar las órdenes de los clientes, a veces compitiendo entre sí para ver quién puede preparar su orden más rápido. Por un momento es divertido para las camareras hasta que se dejan llevar y hay que recordarles que no es el momento de sus tonterías, es hora de trabajar.

Este sábado en cambio, está en su mayoría vacío siendo solo una pareja con sus niños los únicos clientes que han tenido hasta ahora, todo porque una fuerte tormenta se desató.

«Bueno, el hombre del clima dijo que tendríamos unos días con lluvia», comenta Jiwoo (a quién por cariño le dicen Chuu), de pie en la punta de los dedos de los pies para mirar la lluvia desde la ventana de la puerta de atrás.

«Sí, pero esto no es como singing in the rain, es como, no sé, el clima de Sharknado o algo así», responde JinSoul, arrojando un nueve verde a la mesa. Yves resopla y alcanza una carta en la pila antes de pasar.

«¿Alguna vez has visto a Sharknado?» Pregunta YeoJin; sus cejas se fruncen en un ceño confundido mientras lanza una verde con +2 en ella. HyunJin golpea su puño sobre la mesa, buscando frenéticamente una carta para matar a YeoJin.

«... No,» JinSoul admite al mismo tiempo que HyunJin lanza una carta de +4 en la mesa «¡Agh! las odio a todas» la rubia dice molesta en lo que saca 6 cartas de la pila. YeoJin y HyunJin chocan los cinco con sonrisas petulantes y risitas al ver el sufrimiento de la mayor en el juego.

Kim Lip las mira, completamente divertida, apoyada contra el marco de la puerta. No está segura de si deberían jugar Uno durante las horas de trabajo, a pesar de que en el restaurante loonaverse está vacio cual desierto, pero Heejin les da más libertades de lo que normalmente hace un jefe. Demonios, a veces ella es la que entra en la cocina con una baraja Uno, preguntando si alguien quiere jugar.

«¿Crees que una de ellas está haciendo trampa con un montón de cartas +2?» JungEun pregunta con una risita. Choerry simplemente suspira en lo que cierra su celular.

«Yo me uniría a la partida, pero siento como si Yeojin y Hyunjin estuvieran tramando algo» admite Choerry, desplazándose las fotos de Instagram sin darle mucha importancia, mirándo al grupo que juega de vez en cuando.

Kim Lip mira al par mencionado, notando las complices miradas que comparten de vez en cuando y levanta una ceja. Ella ni siquiera está sorprendida;  Yeojin y Hyunjin son un dúo competitivo, aunque Yeojin lo muestra mucho menos.

«Además es la cuarta vez que hacen que Jinsoul tome cartas desde que comenzaron a jugar. ¿Te das cuenta de lo sospechoso que es que todavía no haya sacado algún +2 o +4?» Ella comenta justo cuando Yves golpea una carta sobre la mesa, gritando 'Uno'.

•· In my head we belong ·• «LipSoul»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora