PRÓLOGO
Lucía es una niña de 14 años que vive con su madre y su hermano en una casa, que está en condiciones bastante cuestionables, en un pequeño pueblo de Murcia. Su padre se fue cuando ella tenía 1 año, por lo queLucía nunca ha tenido lujos, ni siquiera los más mínimos, aunque se pueden mantener perfectamente, sin embargo, su madre perdió el trabajo hace 1 mes, lo que ha dificultado su situación, pero Lucía está contenta, porque ES VERANO y ¿quién no está feliz en verano? Amigos, fiestas... ¿amor?
CAPÍTULO 1
2 de junio
Hoy, como todas las mañanas, me he despertado con la alarma y he ido a despertar a mi hermano, ya que mi madre ha salido temprano esta mañana, para hacer unas cuantas entrevistas de trabajo. Estoy saliendo de mi casa y llego tarde, debido a que me he preparado y cuando me he dado cuenta mi hermano no tenía ni la camiseta puesta, por si no lo sabíais un niño de 6 años necesita que le elija alguien la ropa (o al menos es lo que me ha dicho el).
Llegamos 10 minutos tarde, dejó a mi hermano en su clase, y cuando yo entro a la mía, la profesora ve muy necesario recordarme que llegó tarde, como si no lo supiera ¿no? Me siento en mi sitio al lado de Cris, mi mejor amiga, llevamos toda la vida juntas y espero no tener que separarme de ella en toda la vida (bueno...por lo menos hasta que se acabe el instituto)
-Tía, ¿esta profesora es tonta? – le susurro a Cris, mientras dejo mi mochila detrás de la silla.
- ¿Te acabas de dar cuenta? – Me dice riéndose – Está enfadada porque Roberto no para de dar el por culo.
-Joder, ¿Tan temprano? – Digo impresionada, Roberto no empieza con sus mierdas hasta por lo menos las 10 de la mañana – Bueno, el año que viene nos lo quitamos de encima.
-Ojal... - Cris no logra terminar, ya que un grito de nuestra profesora de lengua diciendo que nos callemos, la interrumpe.
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Llegamos al recreo y nos juntamos con Pablo (el amigo gay) y Laura (la buena estudiante, que sabe hasta a la universidad a la que quiere ir y solo estamos en 2º de la ESO), y, como cada junio, Lola saca el tema de qué es lo que vamos a hacer con nuestra vida, así que, empieza a contarnos lo mismo de todos los años.
-... ¡AA.! Claro y también iré a la UCAM y... - Yo he desconectado, como todas las veces que cuenta la historia, pero despierto de mi ensoñación cuando Pablo le grita para que se calle.
- Vale, vale- Le dice con cara de decepción, supongo que porque la planificación de su vida no nos interesa tanto como ella se pensaba.
- Joder, lo siento es que... estoy un poco nervioso – Dice mordiéndose las uñas – Es que, no sé cómo decirlo...
-Oye, Pablo, que ya sabemos que eres gay, eh – Dice cristina riéndose, mientras los 3 la miramos con cara de desaprobación.
- NO, joder Cristina no es eso, es que... me mudo – Dice del tirón.
Nos quedamos las tres con la boca abierta, sin saber que decir, bueno menos Laura, que ya está llorando encima de Pablo mientras que él la consola.
-No me jodas... ¿y adónde vas? – Digo yo, casi sin saber que palabras utilizar.
-Me voy a Alicante, mi padre no encontraba trabajo aquí, y como mi madre no trabaja, no hay problema para que nos vallamos.
- ¡Cómo que no hay problema! – Dice Laura mientras absorbe los mocos y solloza.
-No te pongas así, que ni si quiera estoy tan lejos, es solo 1 hora – Dice el pobre intentando que deje de llorar.
- ¿Y tú, ¿cómo estás? – Pregunta Cris en un intento de que la situación no gire en torno a Laura.
- No sé, es que, yo me entere hace 2 semanas, supongo que ya lo he asimilado. Pero me da miedo, voy a tener que empezar de cero con todo.
-Ostia... es que es una putada. ¿Pero bueno, nos queda este verano, ¿no? – Cris, como siempre está intentándole sacar el lado bueno a esta mierda de situación.
-Mierda...el verano – Dice para sí mismo, como descubriendo algo y abriendo los ojos como platos, lo que hace que salten todas nuestras alarmas.
- ¿Qué...que pasa...? – Digo yo.
-Mi madre me dijo que nos iríamos el 4 de julio... - Se nota que se acaba de dar cuenta de que no va a pasar el verano aquí.
-Joder...que puta mierda. – Dice Cris, que se da cuenta de que no hay ningún lado positivo en esta situación.
-Bueno, yo también tengo que decir algo – Dice Cris, la miro a los ojos, y creo...creo que tiene ¿miedo?
- ¿Qué, eres bollera? – Dice Pablo, con una sonrisa de oreja a oreja e intentando quitarle hierro al asunto, y nos reímos todos, menos Cris, claro.
- ¿Qué pasa, te gusta dar, pero no recibir, ¿no? – Le dice Laura intentando meter cizaña.
-Venga tíos que es algo serio – Dice casi suplicando.
Y en un intento de seguir la broma digo:
- ¿Qué pasa, tú también te vas? - Cris se pone muy seria, y de repente, se hace el silencio total en el banco rojo del patio.
Joder, siempre la cago.
Bueno...sí – Justo cuando Laura va a abrir la boca, Cris dice: -Pero yo no me mudo, solo me cambio de instituto.
Joder – Digo prácticamente suspirando.
Suena la sirena, que indica que ya se ha terminado este recreo, este recreo infernal.
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En toda la mañana no he hablado con Cris, y eso que estamos al lado, pero no he podido, estoy asimilando que ya no nos vamos a ver todos los días, a sentarme al lado suyo ninguna mañana más, ni tampoco a hablar pestes de los profes con ella. Y con todos estos pensamientos, por fin estoy en la puerta de mi casa, estoy deseando contarle todo esto a mi madre. Ella me abre la puerta y le doy un beso en la mejilla a la vez que entro, seguramente con una cara de tristeza máxima, porque no llevo ni cinco minutos en la cocina cuando ya me está preguntando que qué me pasa.
-Mama, me pasa que Pablo se muda y que Cris se va del colegio. – digo muy dramática.
-Lucía, hija, no sé qué decirte...debe de ser duro para ti saber que no vas a ver más a tus amigos, pero se consciente de que son solo dos años más de instituto y ya te vas a conocer a gente nueva, además, tú ya has pasado por mucho, esto no puede contigo, mi niña. – Aprecio mucho a mi madre y el cómo intenta consolarme, siempre ha estado hay para mí, luchando por mí y siempre intentado ser mejor por mí.
-Pero una mudanza no es para tanto, ¿no? Y además este pueblo no es, ni de lejos bonito. – Entiendo que me quiera consolar, pero no entiendo esto, parece que me quiere convencer de que irse de aquí sea lo mejor del mundo.
- ¿Qué quieres decir? – Preguntó muy seria, después de lo de esta mañana, me espero cualquier cosa.
-Lucía quiero decir que nos vamos. – Mi madre siempre ha sido muy directa y nunca me ha ocultado nada, pero, joder lo podría haber dicho con un poco más de tacto.
¿¡QUÉ?! – Digo gritando, y se me cae el tenedor con el que estoy comiendo de la mano.
-Haber Lucí, déjame que te lo expliqué. Como ya sabes perdí el trabajo hace un mes, así que, llamé a tu tía Mari, para que me aconsejara y ya de paso que me dijera que todo iba a estar bien. – Lo entiendo, porque mi Tita Mari y mi madre son inseparables, espero que mi hermano y yo estemos algún día tan unidos como ellas- Y el caso es que, en vez de consolarme, me dijo que allí, en su restaurante, me podría dar un puesto.
-Espera, ¡La tita Mari!, pero si vive en Málaga – Madre mía esto es demasiada información, ¿y si me mudo?, ¿y si me mudo a Málaga?
Joder, joder, joder, joder... Yo pensaba que esto solo pasaba en las pelis, mi cabeza va a explotar, no me puedo creer que me vaya a ir tan lejos, y ¿que amigos voy a hacer?, porque mi tía no tiene hijos, y ¿como cojones se lo voy a decir a los demás?...van a pensar que es broma y ojalá lo fuera, además la pobre Laura se va a quedar sola...joder...... pero bueno todavía no hay nada confirmado.
- ¿Entonces qué mama?
-Lucía...
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TU, YO, AQUI Y AHORA
RomanceLucía es una niña de 14 años, que vive en Murcia con su madre y su hermano,es verano y se acaba de enterar de que sus amigos se van del pueblo, pero esa no es la noticia que lo cambiara todo, porque ella también se va y la mudanza y todo lo que ocur...