Cuando llevas la vida entera conviviendo con un monstruo es difícil identificarlo cuando empieza a revelar su verdadero yo, tal vez es el inconsciente o la estupidez humana misma que te llevan a hacerte de oídos sordos y ojos ciegos, pero no te dejes engañar, aquí no hay nadie bueno.
En cada frase se esconde un misterio,
En cada sonrisa un secreto,
En cada verdad una mentira
Y si no andas con cuidado puedes perder la vida.
Así que abre bien los ojos, créeme hay varias pistas, si no las encuentra no te aseguro que llegarás al final con vida.
Nunca había sido una persona paranoica, pero ¿cómo no serlo en este momento?, en tan solo tres meses habían desaparecido cuatro chicas, con las que compartía clases, el almuerzo, con las que muchas veces me había emborrachado a más no poder.
Estaba más asustada que cuando no me lleva el periodo a tiempo, y eso es mucho decir.
Me volteo cuando escucho la campanita que suena al abrirse la puerta de la cafetería favorita de cualquier adolescente en este pueblo; BOBBY' SHOP, si, si, raro, pero sirven las mejores malteadas del mundo y eso lo compensa todo. Cuando veo su cabello negro con las puntas azules sé que mi acompañante se dignó a aparecer después de una hora de la que indicamos encontrarnos.
Típico de Echo.
Después de pedir su malteada de fresa se sienta en frente mío con una sonrisa idéntica a la del Joker, ella siempre está sonriendo, yo en cambio siempre ando con una cara de mierda.
¿Qué pasa guapa? – siempre hace lo mismo, llega tarde, me saluda con un halago y luego yo la perdono, es una rutina.
Llevo una hora esperándote, vieja desconsiderada – hago énfasis en que tengo una hora con el culo dormido levantando mi dedo índice y con cara no de pocos amigos sino de enemigos a muerte. Ella se lleva la mano al pecho y pone cara de indignación.
No sabes cómo me duele tu maltrato luego de todo lo que tuve que hacer para llegar aquí – acompaña su frase limpiándose las lágrimas falsas con un gesto más que dramático.
Si, ajam – le dije ya aburrida de esta insignificante conversación.
Ya no te enojes, estaba con Enzo – me informa antes de contestar la llamada de su madre.
Siempre le había gustado ese chico, desde los siete años, era guapo, pero no un Adonis, ella lleva la vida detrás de él, pero al parecer él no busca nada serio, son una especie de amigos con derechos que además serán dentro de un mes hermanastros...vaya lío.
Cuando ella termina de hablar le miró fijamente.
En menos de treinta días lo verás a todas horas ¿no te conformas con eso? – se que le gusta el chico, pero siempre que me deja botada es por él y dejémoslo claro no me agrada, siempre que esta cerca de nosotras se comporta indiferente, ni la voltea a ver y la estúpida no se da cuenta.
Ya, hablemos de otra cosa – dice con un tono de cansancio en la voz – oye ¿sabias que encontraron el diario de Sam, algunos dicen que estaba enamorada de un chico, otros que la estaban extorsionando y tal vez huyó, y algunos locos piensan que ella tenía una enfermedad mental o algo así lo que es muy raro porque ella parecía muy normal.
Sam había sido la última en desaparecer, la cuarta víctima, era una chica un tanto tímida pero en un pueblo pequeño eso no era un gran problema, su pelo color miel hacía contraste con su piel pálida, sus ojos del mismo color que su pelo daban la sensación de que siempre estaba asustada, miraba de un lado a otro, siempre, por alguna razón era una persona que se fijaba en todos los detalles así que para mí era muy difícil procesar su desaparición.
Si la habían seguido ¿no lo habría notado?, si se sentía más asustada de lo común ¿Por qué no pidió ayuda?, ¿Quién había sido? ¿Por qué lo habría hecho?, ¿ella lo conocía? Últimamente me cuestionaba muchísimos las cosas, siempre tratando de atar cabos y ninguno encajaba, ¿en realidad había huido?
¿Quién tiene el diario? – después de pronunciar esas palabras me gane una cara de; enserio.
La policía, obvio – me dice ella frunciendo el ceño ligeramente.
Entonces no sabemos si nada de eso es verdad o no – le dije.
Exacto tonta, por eso hay tantas versiones – me da con sus manos un zape en la cabeza.
Ahh – si, estaba un poco tonta, a decir verdad.
Después nos adentramos en un silencio largo en el que sabía que las dos compartimos los mismos pensamientos.
¿Qué le pasó realmente? ¿dónde está? ¿estará viva?...
Quien habló primero fue ella.
Tengo miedo – me confesos un poco apenada.
Y yo – le hice saber – pero nada nos pasara – sonó más seguro que como en verdad me sentía -Si es posible siempre saldremos con mi hermano, Pax y Blas.
No creo que una mujer necesite de un hombre para salir adelante, en lo absoluto, pero la verdad es que ellos conversaban el gimnasio del que yo era enemiga.
¿Me entienden?
Esa bola de inútiles no sabrá que hacer delante de un asesino serial – me dice ella burlona.
Un asesino serial...
Será eso, hay un asesino entre nosotros, las chicas estaban muertas...
Pues los utilizamos como carnadas y nos dará tiempo de correr – le dije en forma de broma.
Eso sí – dijo, apoyando mi idea.
Nos reímos de tonterías un par de minutos más y luego nos despedimos y tomamos direcciones diferentes, cada una iba para su casa.
El recorrido es corto solo estaba a tres cuadras de mi casa, cuando llegué no había nadie, supuse que mamá estaba en la casa de Mahpe quien era la vecina y su mejor amiga al parecer, papá seguro que estaba en su oficina y mi hermano o estaba con mi novio jugando a los videojuegos o follándose a una chica.
Las cosas como son.
Cuando llegue a mi habitación todo estaba igual a como lo deje, todo estaba intacto, perdón me corrigió todo el DESORDEN estaba intacto, excepto una cosa.
La ventana.
Que yo recuerde estaba cerrada cuando me fui, ahora estaba abierta.
Por alguna razón voltee el cuerpo entero, es como si alguien me estaba mirando, me sentí observada, como si me estuvieran atravesando con la mirada, al voltearme no vi nada ni a nadie.
De repente una brisa un poco fuerte entró por la ventana, lo que como consecuencia hizo que algunas hojas de mi mesita de noche cayeran al suelo.
Avance y me agache, cuando estuve lo suficientemente cerca para poder agarrarla, y me paralice por un segundo y al otro estaba templado más que un chihuahua.
No eran muchos de mis borradores de novelas cursis, ni trabajos viejos, ni exposiciones que estaba acostumbrada a escribir por si acaso, lo que tenía en mis manas eran dos hojas de un tono un poco amarillento que le daba un toque un poco antiguo, pero no fue el color que me asusto al punto de cagarme ahí mismo.
Créanme que todo estaba normal, excepto por dos cosas obvias.
Las hojas no eran mías y la letra mucho menos.
La primera que agarré decía:
21 de octubre, 2019
Querido diario...
Y esas dos frases me dejaron con cara de; WTF.
Porque a pesar de que no eran mis letras yo conocía de quién eran esas "a" con formas de culo y esas "t" demasiado altas a mi parecer, eran de ella...
Esas hojas eran del diario de Sam...
Y estaban en mis manos...
En mi habitación...
¡Mierda!
YOU ARE READING
Pueblo de Mentirosos
Mistero / ThrillerMi pueblo era muy común, pero descubrí que hasta lo más simple puede guardar secretos aterradores. Mi pueblo era tranquilo, pequeño y acogedor pero eso cambió cuando las chicas empezaron a desaparecer. Susan Macklar desapareció después de una fiesta...