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La temporada de golf transcurrió en un remolino de fiestas y eventos sociales. Aunque Niall pasaba todos los veranos en los Hampton desde que era un niño, nunca había estado tan ocupado.
Zayn y Niall pasaban juntos todos los fines de semana, pero rara vez estaban a solas. Y, aunque tonteaban descaradamente, nunca más habían vuelto a hacer el amor.
Pero Niall sabía que tenía un problema porque empezaba a enamorarse de Zayn. Su único consuelo era que el evento terminaría pronto y su vida volvería a la normalidad.
Antes de que se diera cuenta, llegó el día de la fiesta de compromiso y un ejército de decoradores y camareros contratados por el equipo de su padre apareció en la casa tres días antes del evento.
Durante los últimos días de su falso compromiso apenas vio a Zayn, aunque seguramente era lo mejor porque, si se vieran, seguramente haría alguna estupidez como decirle que estaba enamorándose profundamente.
La noche de la fiesta, Niall se movía entre la gente, saludando a unos y a otros con una sonrisa en los labios. Después de toda una vida fingiendo ser el hijo perfecto del senador, nadie se daría cuenta de lo angustiado que estaba.
Desde que le presentó a su padre, un momento incómodo para los dos porque ninguno parecía saber qué decir, Zayn no se había apartado de su lado y su presencia lo animaba un poco.
Y cuando el senador lo dejó para hablar con gente más «importante», se quedó a su lado.
—¿Dónde se conocieron? —les preguntaba todo el mundo.
—En la fila de un restaurante de comida asiática, el favorito de Ni —contestaba Zayn—. ¿Cómo se llama el sitio, cariño?
—Meyakiito —contestaba Niall feliz.
—¿Y desde cuándo están juntos? —preguntaba otro.
—Desde hace tres meses —mentía Zayn—. Al principio queríamos mantener la relación en secreto... hasta que nos descubrieron.
Por fin, alguien se atrevió a señalar que Niall no llevaba anillo de compromiso.
—Espero que no sean una de esas parejas modernas que no se molestan en pensar en los lazos como la mordida o llevar alianzas.
Zayn sonrió a la chismosa que se había atrevido a hacer el comentario.
—No, señora. He decidido regalarle el anillo de mi abuela —respondió seguro Zayn—. Yo vengo de una familia humilde y, aunque sé que Niall estaría orgulloso de llevar cualquier anillo, lo he enviado a la joyería para que cambien el sencillo lapislázuli por un diamante. Es una banda de platino que le regaló mi abuelo...
Cuando Zayn terminó de describir el anillo de su abuela, la vieja chismosa tenía lágrimas en los ojos. Y no era la única. Niall tuvo que disculparse para que no le vieran los ojos llorosos como un tonto sentimental.
Solo, con la espalda apoyada en la pared del cuarto de baño, apartó las pequeñas lágrimas de un manotazo. ¿Por qué lloraba por un anillo que no existía? Y el alfa que había inventado esa historia era tan falso como el anillo.
Oh, pero cuánto desearía que fuese real. Le gustaría tanto que Zayn fuera sincero. ¿Cómo sería ser amado por ese hombre y no seducido por el playboy?
***
Zayn era seguramente el primer novio de la historia que esperaba un «si le haces daño a mi pequeño onega, te mato» por parte de su padre.
Porqué cuando el senador Horan lo llamó para hablar con él en su estudio, esperaba que le dijera eso. Hasta aquel momento no había mostrado alegría alguna por el compromiso y Zayn sabía que su desinterés era muy doloroso para Niall.
¿Por qué no podía al menos fingir que estaba entusiasmado?
Pero cuando el senador cerró la puerta del estudio y le sirvió un whisky, Zayn se dio cuenta de que no iba a decirle nada de eso.
—Imagino que ya sabes que mi hijo es un omega con mucho carácter.
Zayn apretó el vaso de whisky.
—Mucho carácter y mucha personalidad, desde luego.
—Tiene buenas intenciones, pero ya te habrás dado cuenta de que tiende a provocar a la prensa.
Zayn asintió con la cabeza, sin saber a dónde iba aquella conversación y conteniéndose para no decirle que de no haber sido por su propia indiscreción años antes, a nadie le importaría lo que hiciera o dejara de hacer Niall.
El senador Horan se aclaró la garganta.
—La cuestión es que estamos en año de elecciones y les agradecería a los dos que intentaran evitar más escándalos en los próximos meses.
Zayn no sabía si soltar una carcajada o darle un puñetazo, pero decidió dejar el vaso de whisky sobre la mesa e inclinarse hacia delante.
—Con todo respeto senador, es usted un idiota.
—¿Cómo dices? —soltó el alfa desconcertado.
—Si le importase su hijo la mitad de lo que a él le importa su carrera, sería usted mucho mejor persona, se lo aseguro. Pero como no es así, deje que le diga un par de cosas: Niall jamás le haría daño a propósito. Y cuando estemos casados, le agradecería que hiciera todo lo posible por alejarse de nuestras vidas.
Después de decir eso, Zayn salió del estudio, dejando al senador boquiabierto.
Tenia que salir lo mas pronto posible de ahi. Por que tanto él como su alfa estaban a punto de perder la paciencia y decirle «idiota» al senador Horan seria lo más inocente que pasaría si se quedaba un segundo mas con él a solas.
Sólo cuando estuvo rodeado de gente otra vez se dio cuenta de lo que había hecho: había hablado con el padre de Niall como si de verdad fueran a casarse y unirse para siempre.
Durante unos minutos, había olvidado por completo que la relación era una mentira.
Y que esa mentira estaba a punto de terminar.
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Ustedes no están para saberlo y yo para contarlo pero SE VIENE EL DRAMA DE LA APUESTA 👀HAY ME ESTA COSTANDO MUCHO ESCRIBIR PORQUE QUIERO METER LOS CELOS PERO AAAHHH! Ya veré como arreglar la historia 😂
Gracias por la paciencia, espero poder subir capítulo pronto 🥰
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Accidental Fiancé | Ziall
FanfictionZayn Malik es un alfa «playboy» corredor de bolsas y Niall Horan es un omega «puritano» hijo de un famoso senador. Ellos se conocen en un bar una noche. Después de esa noche Zayn no podía olvidar a Niall. Estaba obsesionado por volver a acostarse c...