No estoy bien

Damián

Pronto llevaré una semana internada aquí, no hablo con nadie, todos los días recibo visitas, de mi família o de Damián, hemos sido amigos desde los 10 años, tenemos una relación como de hermanos, la noche en la que le dije que había tomado todas las pastillas de mi madre se volvio loco y llamó inmediatamente a mi papá, es asi como mis padres se dieron cuanta de lo que intentaba hacer.
- creías que te iba a dejar morir tan fácil, es obvio que aun no me conoces, tantos años de amistad y es como si no me conicieras.
- callate tonto, no me siento bien no bromees con eso.
-aaaay que sensible, ni que estuvieras en un loquero, disculpa si lo estás
Ambos comenzamos a reir, sus visitas hacian que me olvidara por un segundo en donde estabamos, solo por un segundo, porque ese dolor en el pecho me lo recordaba a cada instante.
-los ensayos de la banda no son lo mismo sin ti, no tenemos a nadie en el bajo.
-pueden conseguir a alguien mucho mejor que yo en menos de dos segundos.
-claro que no.
-claro que si.
Seguimos bromeando hasta que ya se tuvo que ir, asi eran todos los días, aveces recorriamos el loquero (como le deciamos) yo estaba en el sector D, los intentos de suicidio, el sector A era el peor, ahi estaban los enfermos mentales, los locos, locos.
Damián se fue y yo me dirigí a mi habitacion, no sin antes ir a dar una vuelta por el patio, era lo que mas me relajaba de ese lugar. En el jardin habian girasoles, hermosos girasoles, podia pasar horas mirando esos putos girasoles y pensando.
Al ingresar a la residencia me quitaron el celular, asi que no tenia metodo de distracción. De seguro leyeron todo lo que tenia escrito en mi block de notas, ahora todos sabían los oscuros pasadizos de mi mente. Si soy sincera queria que los leyeran, pero una vez estuviera muerta, no ahora, soy tan inservible que ni matarme lo hice bien, aqui estoy mas viva que nunca, pero a la vez mas muerta que todas las otras veces.