grupo

8 1 0
                                    

Cómo ya llevo una semana aquí, el psicólogo creé que es buena idea que comience a relacionar con los demas internos, como vio cero interes de mi parte, el decidió que era buena idea unirme al grupo de ayuda de los internos de mi misma edad.
Hoy tuve la primera junta, me hicieron presentar con los demas integrantes, una chica me llamó la atencion, bueno en realidad dos personas, ella se llama Alison y el otro chico se llama Gabriel. Tenian mis mismos intereses, ambos querian morir, el resto era una manga de retrasados que solo tenian problemas superficiales, nada mas allá.
Cuando se acabó la sesión fui a mi habitación, la verdad no tenia ganas de nada que no fuera dormir, cuando estaba por legar a la puerta choque sin querer con Gabriel, me dijo correte y siguió su camino, Alison venia justo atras de él, dijo "perdonalo tiene depresión" lo dijo con sarcasmo, como si nadie mas del internado entero lo tuviera, automaticamente se formo una sonrisa en el rostro, del mismo modo en que llegó se fue.
-cuanto llevas aquí?
-mañana cumplo una semana, y tu?
-prácticamente vivo aquí
Alison usaba un sueter rosado palo, era grande y las mangas le cubrían hasta las palmas de las manos. Soy observadora y logre darme cuenta del vendaje que tenia en su muñeca izquerda, obviamente intento cortarse las venas.
-por qué? Tus padres se cansaron de ti y no han vuelto a buscarte, o qué?
-realmente espero que un día se cansen de mi, si estoy aqui es por ellos.
-cuántas veces has intentado cortarte las venas?
-y cómo sabes que eso es lo que hice?
-soy observadora.
-y tu cuantas pastillas te tomaste para terminar aquí?
-cómo sabes que tome pastillas
-es obvio, no tienes nunguna marca, aparte es tipico de principiantes
Lo dijo con una cara burlona y era obvio que estaba bromeando, nos reímos un poco, pero no demasiado. Me acompaño a mi habitacion y luego ella se fue a la suya.
Mi habitación era blanca sin nunguna gracia, almenos mi habitacion real era acogedora, pero eata solo hacía que me dieran mas ganas de matarme.

No estoy bienDonde viven las historias. Descúbrelo ahora