pistantrofobia

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Sust. Miedo a volver a confiar en las personas debido a experiencias negativas en el pasado.

-Tal y como aquel conocido refrán "tras la tormenta viene la calma", el habernos conocido trajo la tranquilidad y la felicidad a nuestras vidas.

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"Año nuevo, vida nueva" una frase típica del primer día de cada año, todo el mundo la ha dicho alguna vez para que, al final, su vida siga siendo la misma el año siguiente; sin embargo, éste no es el caso de ellas.

Inicia el año, días después el 2do lapso y en menos de una semana empiezan los cambios en la vida de estas chicas.

Después de una falsa calma, le llegó la verdadera tormenta a una de ellas; luego de haber pasado unos horribles meses, ella creía que éste era su momento de tranquilidad cuando en realidad venía el golpe más fuerte.

Ésta se sentía mal al, luego de ser ilusionada, sufrir de una discusión con su mejor amigo, que la hizo sentir culpable y como un estorbo para el anterior. Estaba mal y arrepentida preguntándose cada día cuándo le llegaría su momento para ser feliz.

Por otra parte, la otra chica tenía casi los mismos sentimientos que su contraria, a diferencia de que ésta sentía que era ella quien estaba usando a la persona que era su pareja en ese momento; se sentía mal, habían un sin fin de cosas que no la estaban dejando ser feliz.

Simultáneamente que estás dos chicas sufrían, nacía una relación entre sus mejores amigos que trajo como consecuencia uns supuesta indiferencia hacia éstas. Esto a ellas les hizo sentir mal debido a que, por más que éste no fuera el caso, sentían que estaban perdiendo a esas tan importantes personas.

Todo esto ocasiononando que nuestras chicas comenzaran a hablarse cada día un poco más, añadiendo cada vez un granito de confianza y cariño; tal vez más de un granito, quizás poniendo grandes cantidades de cariño y, tan sólo como una posibilidad, algo más allá que simplemente eso.

Porque con el pasar de los días, de las horas de conversaciones, después de tantas madrugadas hablando, nuestras chicas fueron sintiendo más que sólo cariño.

Pero tenían miedo.

Miedo por no saber si eso era lo correcto. Miedo por no saber de qué manera afectaría a su amistad la posibilidad de que estos sentimientos no sean correspondidos. Miedo por confiarle nuevamente el corazón a otra persona, por no saber si será destrozado de nuevo.

Miedo que cada una trataba de ocultar a su manera, una tomándolo en broma y la otra negando, para al final ambas fallar debido a que éste era el que les nublaba el pecho por las noches.

Porque ¿Qué pasaba si se repetía la historia? ¿Y si esta vez era una quien destrozaba al contrario? ¿Qué tal sí todo salía mal y se perdían la una a la otra? Y de salir bien, el miedo a no saber mantenerlo, porque una relación así, a pesar del tiempo en el que estamos, es foco de malos comentarios y reacciones negativas por parte de personas con mentalidades antiguas, entonces ¿Cómo podrían ellas aguantar eso? ¿Son capaz de lidiar con algo así?

Así fue entonces como pasó semana tras semana, eran infinitas las horas donde se les llenaba la mente de incógnitas, cada semana esos miedos seguían manifestándose así como aquellos lindos sentimientos se iban formando y volviendo cada vez más difíciles de ocultar.

Sentimientos que, por la pistantrofobia que se les creó, no eran capaces de revelarle a la otra, pero por suerte aquellas dulces miradas les ayudaban a tener pequeñas esperanzas y pistas de que tal vez, pero tan sólo tal vez, éstos sí eran mutuos.

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