Parte III

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Un par de semanas después, Aidan le pidió a Abby que fueran novios, en realidad Abby nunca había tenido la dicha de que alguien le pidiera ser su novia y mucho menos de la manera que lo haría Aidan, con una nota, una Rosa, un chocolate y un video con fotos de ellos, fue la manera en que se declaró a Abby, ella con lágrimas en los ojos aceptó, abrazo y beso a Aidan, ya todo era oficial, Abby siempre presumía de sus conversaciones y detalles que recibía y tenía de Aidan.

Esa relación era lo mejor que le había podido pasar a Abby, digamos que ella no era la típica chica que sale con todos, ella era alguien reservada pese a ser muy bonita, era demasiado aplicada en la escuela, salía de vez en cuando a fiestas, pero nunca había tenido intenciones de tener algo con alguien después de varias cosas por las que había pasado mucho tiempo atrás, pero nunca se cerró por completo a la posibilidad de que, quizás, en algún momento de su vida alguien llegará a cambiar eso, pero esa vez fue de manera drástica y bonita. La relación de Abby y Aidan iba viento en popa, hacían todo juntos, iban con Violet y los demás a varios lugares, la linda de Violet siempre los apoyo y estuvo feliz cuando supo que eran novios.
Honestamente Abby y Aidan tenían una conexión inexplicable, tenían muchas cosas en común, en cuanto a gustos, sueños y de más cosas, en otros aspectos el uno al otro se complementaban y un gusto que tenía alguno de los dos, el otro lo terminaba adquiriendo de forma inconsciente. Ni hablar más de la conexión tan fuerte que había, se complementaban tanto  mental y físicamente, que nunca hubieron problemas grandes, solo una vez en la que Abby saldría con Aidan, Violet y los demás, pero Aidan llegó casi 1 hora tarde, pero el enojo no le duro y terminó perdonando le eso, fuera de eso nunca tuvieron ms problemas, pasaron los meses y esa relación seguía tomando fuera, fue cuando Abby estaba por graduarse de la preparatoria y Aidan pidió que lo acompañara junto con su familia a un lugar en el que tenía que estar ese fin de semana en cuando Abby se graduara, ella un poco temerosa aceptó, sabía que sería la primera vez conociendo a la familia de Aidan, no como amiga de Violet, sino como la novia de Aidan. Cuando se llegó el día de conocer a la familia de Aidan en ese pequeño viaje, todo había resultado tan bien, iban en la camioneta rumbo a su destino, algo curioso aún que no poco común, fue que el motor de la camioneta se había sobrecalentado de más y tuvieron que esperar por ayuda, no fue del todo malo, les toco ver uno de los atardeceres más hermosos que pocas veces se pueden llegar a apreciar, un cielo con los colores más brillantes y hermosos que los ojos humanos podrían apreciar, Aidan y Abby se alejaron unos cuantos metros a apreciar la belleza del cielo, Violet esperando fuera de la camioneta aprovechó a sacarles una foto, quedó plasmado aquel recuerdo tan hermoso en una foto que sería de las favoritas de Abby. Después de eso llegó la ayuda y se dirigieron al lugar donde tenían que estar, era la primera vez que Abby pasaba el fin de semana con alguien que no era de su familia pero que se sentía como si lo fuera, lo bueno era que tenía a su mejor amiga ahí y no tenía que tener, ya que la familia de Aidan la había aceptado tan bien que incluso su mamá preguntaría por ella y la invitaría a casa a comer.
Pasaron unos cuantos meses más de felicidad, amor, salidas, idas al cine, a comer, a cenar y de más, Abby era extremadamente feliz y había cambiado de una forma casi notoria donde siempre estaba de buen humor y se esforzaba más en hacer sus cosas, aun que no había quedado en la Universidad y decidió tomarse un año sabático, era feliz por que Aidan estaba con ella y hacia su vida feliz, aun pese los malos momentos que Abby llegaba a tener con su familia. Pero esa felicidad no duro mucho, faltaban un par de semanas para el cumpleaños de Abby, y todo su mundo perfecto se rompió en mil pedazos, Aidan no respondía mensajes, ni las llamadas de Abby, empezaba a preocuparse por que algo le hubiese pasado, llamó a Violet y le preguntó si sabía algo, dijo que el estaba bien, pero que a veces el era así y se comportaba de manera extraña, Abby decidió darle su espacio, pero en el Fondo sabía que había algo mal en todo eso, pasaron los dias y Abby continuaba con el sentimiento de que algo pasaba, sentía angustia y temor, una noche recibió una mensaje de Aidan, el hablaba de forma cortante y fría, Abby le respondió como de costumbre, pero al esperar una respuesta como siempre, no la obtuvo, cuando leyó las líneas que escribió Aidan en su mensaje, a Abby sintió que todo su mundo se venía abajo, comenzó a llorar instantáneamente, no le dijo nada a Aidan, acordaron de verse al día siguiente para hablar y terminar, Aidan no quería terminar con Abby por un texto, sabía que era lo peor en el mundo que se podía hacer, así que al día siguiente Abby se dirigió a ver a Aidan a un pequeño parque donde acostumbraban ir los fines de semana, cuando llegó y vio a Aidan sentado en el fresco pasto, se acercó a el, pero siento una puntada en el corazón, comenzó a llorar nuevamente, Aidan comenzó a hablar y aquello que había dicho en el mensaje junto con otras palabras, fue lo que le dijo a Abby en ese momento, resulta que Aidan había tenido un accidente donde había quedado todo en juego y corría peligro tanto el como las personas que quería, no quería que Abby se viera involucrada y afectada, le dijo que no quería eso para ella y por eso terminaba su relación, Abby con lágrimas cayendo por su rostro no pudo decir nada, tenía un nudo en la garganta, uno tan inmenso que incluso pareciese que le costaba respirar, cuando Aidan estaba por irse, abrazo a Abby, ella le correspondió el abrazo y finalmente el beso la frente de ella y le dijo, no lo tomes como un adiós, tómalo como un hasta pronto, después de eso ambos tomaron su camino y Abby llegó a casa llorando y desanimada, más que otras veces en las que se había sentido así de desanimada y sin ganas de nada. Entró a su habitación y prosiguió a llorar, lloro toda la noche, y al día siguiente, así pasaron varios día en los que no tenía ánimo ni ganas de nada, incluso no comía, no dormía y no salía para nada, el día de su cumpleaños la paso deprimida y sola, llorando, sentía un vacío el cual era evidente no podría llenar con nada.

HopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora