Había llegado la hora de la cena, el tiempo más tenso e incomodo que habían de experimentar las pocas noches que coincidían sentarse juntos en el comedor. Eva no quería verlo a los ojos así que cuando no estaba en las obras de caridad se aislaba en su apocento, todos los días eran retos, retos difíciles y sin poder desahogar sus penas con una persona que le aconseje y le diga que todo estará bien, que es una tentación impuesta por el maligno para quebrar su fe, fuerza interna y comunicación con Dios.

El canto de los grillos, y el sónido de los cubiertos tocando los platos se escuchaba por toda la mansión hasta que Cristián decide poner fin a la inegable tensión

---Cómo van las obras? Han recaudado lo suficiente? Pregunta tomando un sorbo de vino tinto mientras observa de forma atrevida a Eva quién al percatarse de que la esta mirando sin disimular suelta dos suspiros repetido, de lejos se siente la enorme insatisfacción con respecto a las acciones de Cristián

---Todo va de mejor a mejor dice Nircia con una leve sonrisa --- La suma que hemos recaudado es grande, me alegra mucho poder ayudar a los más necesitados, ver el reflejo de alegria y tranquilidad en sus ojos es el mejor regalo que en han podido dar en mucho tiempo.

---Me alegra que todo este saliendo como esperaban

---Gracias a ti, por ser el mejor hermano del mundo y también gracias por colaborar con esta noble causa.

Las últimas palabras de Nircias pusieron en jaque a Eva, abrió los ojos como plato al escuchar salir de sus labios que Cristian había contribuido como la causa, una parte de ella le decía que era buen hombre sin embargo le atrerraba seguir cerca de él, la otra parte le pedía a gritos alejarse lo más rápido posible, el unico problema es que no tenia donde quedarse, no conocía a nadie y no tenia dinero para alquilar una pieza o pasar las noches en un hotel ya que en este lugar todo es bastante costoso lo más sencillo cuenta mucho dinero siendo eso lo que lamentablemente retenía a la noble novicia de corazón puro y de buenos sentimientos.

----Quiero que me digas en este instante quién es la mujer que dices querer para desposar?  Muscita con miradas frías y consecuentes haciendo que Eva estornude varias veces quedando sin palabras ante la incomoda pregunta de Nircia

Por su mente pasaban ideas  pensamientos y mas ideas. Como podría gustarle una mujer que es prohibida? Era la pregunta que se repetía decena de veces por su cabeza, acaso estaba perdiendo la mente las acciones de Cristian parecían sacadas de una terrible novela donde todo es normal algo realmente antes visto. Si que estaba acorralada, sentia el corazón acelerado y los nervios se apoderan de sus piernas las cuales se encuentras flaquendo, el puente de su nariz se humedese y algunas gotas de sudor se posan en su frente haciendo que juegue con sus dedos como tan niña de cinco años cuando quiere pedir algo.

----Tome un poco de agua hermana Eva! Murmura Cristian señalando el vaso con el apreciado liquido contenido, luego de humedecer sus labios con la punta de su lengua, poniendo aún más nerviosa a Eva. Estaba provocando esta situación y peor aún estaba gozando ver lo torpe que ponía por su culpa y todo por los nervios y la osada e inoportuna firma de hacer  sentir el mundo desboronarse, como podía hacer tal cosa y estar tan tranquilo? Estaba seduciendo a una monja y tomando vino como si no fuese nada, como si no estuviera cometiendo pecado.

----Esa mujer de la que tanto te he hablado se encuentra perdida en medio d e un bosque esperando a que su Príncipe llegue a rescatarla y atacarle del lugar ermitaño donde se encuenta..

-----Eso quiere decir.... que...

---Quiere decir que muy pronto tendrás una cuñada y quizás hasta sobrinos

El nivel de dignidad de ese hombre estaba llegando a la mugre como podía decir eso? Como podía siquiera creer que entre una monja y un impio podía haber algo? El enojo recorre cada parte de su ser haciendo que de inmediato se levante de su butaca y de algunas zancadas hasta las escaleras sin antes escuchar su voz por última vez

Mi pecado es Poseerte© BoardMorrisónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora