Falling | h.s.

"Forget what I said , It's not what I meant"

*Capítulo editado

Los gritos y aplausos eran intensos, Harry Styles se presentaba en la O2 Arena en la ciudad de Londres en su natal Inglaterra, como parte de su gira "Live On Tour", el público vibraba con cada canción hacia Harry, mientras él se entregaba a su público.

El ojiverde cantaba y bailaba el tema "Kiwi", ataviado en un traje de la firma Gucci, un chaquetón rosa, una camisa blanca y un pantalón negro, mientras desfilaba por el escenario pidiendo los gritos y aplausos de su público, pues el show estaba por culminar, tras el escenario una persona le esperaba mientras observaba el show mediante las pantallas, se levantó del mullido sofá y se dirigió al camerino del castaño, preparó dos copas de champagne, y se decidió a esperarlo en un pequeño diván que se encontraba en el lugar.

Mientras el coro seguía, Harry bailaba sobre el escenario, pero, algo llamó su atención, siguió con el show, pero dio un par de miradas más, una cara le había resultado familiar, aunque lo ignoró, ya que le parecía imposible, ella estaba en América junto a su familia, se verían allá.

El show finalizó con el su famoso escupido al final de Kiwi, las luces se apagaron y Harry desapareció tras el escenario, la O2 Arena de Londres se desbordaba en aplausos hacia su ídolo, mientras que entre la multitud se encontraba una chica castaña de bonitos ojos cafés, que estaba escondida de entre las primeras filas, su nombre Michelle Sacks.

La chica castaña que se encontraba en una de las primeras filas se encontraba muy emocionada ya que había visto al hombre de su vida dar todo en el escenario; ella no le conocía antes de saber que era un cantante famoso y que había estado en una de las boy bands más importante de todos los tiempos; su humildad, amabilidad y su forma de ser fuera de los reflectores y escenarios fue lo que la había atraído de él y que en ambos naciera algo, ¿amor? Harry estaba atraído por ella por su forma de ser además de su físico, en donde ella había conocido a la persona y no el artista. No es que la chica estuviera viviendo debajo de una roca, sino que Michelle no solía escuchar el pop británico, solo había escuchado hablar un poco de ellos, pero, no era una fan y los conocía muy poco, no imaginaba que Harry fuera "el Harry de One Direction"

Michelle Sacks trabajaba en una agencia de publicidad, uno de sus mejores amigos, era fotógrafo, Alexander Adkins que trabajaba para la revista Vogue UK, la había invitado a una de las tantas fiestas que organizaba la revista, y fue especialmente en una en donde conoció al cantante.

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Harry al desaparecer del escenario, uno de sus asistentes le proporcionó una toalla para secar el sudor y sujetar su chaqueta rosada, el castaño tomó una botella de agua, tomando pequeños sorbos de vez en cuando.

Llegó a su camerino, y su asistente no entró junto con él, se dirigió a realizar algunas diligencias encargadas por parte de Jeff, Harry al entrar la miró, estaba ataviada con unos pantalones ajustados negros de vinilo y una camiseta negra con el estampado de una banda, el castaño sonrió al verla, formando un par de hoyuelos en sus mejillas.

—Camille... No te esperaba hoy.

La chica se levantó de su asiento, tomo ambas copas de champagne y ofreció una a Harry.

—Te dije que aquí estaría, a pesar de todo.

—Creí que no sería así por como terminaron las cosas entre nosotros. ¿Cómo esta tu novio? ¿Ya te llevo a conocer la galería de sus padres?

Harry tomó la copa que momentos antes le había ofrecido la rubia, se la terminó al momento y de inmediato se sirvió otra, Camille rodó los ojos exasperada, se acercó a Harry y rodeo su cuello con ambos brazos, entrelazando sus manos detrás de la nuca del chico.