Anya y la Puerta sin llave

Capitulo 2

-Pi,pi,piiiiiiiiii.

Maldito despertador! Gruñí como si fuese un animal y estiré el brazo para apagarlo de una vez. Me incorporo en la cama y miro mi habitación para orientarme. Es viernes son las 7:30 y hay cole. Qué pereza! Aparto las mantas y me deslizo fuera de la cama. Voy a abrir la ventana para ventilar la habitación, cuando veo en mi mesilla de noche, una pulsera de cuero trenzado de la que cuelga una pequeña moneda de oro y una bolita de ¿plata? No sé. A su lado hay una nota escrita en un papel viejo. Decía así: 《Elige bien. Ellos te estan esperando. Recuerda, solo un día.》 Así que fue real. Aquel extraño tipo me visitó de verdad. El rugido de mis tripas reclamando comida me sacó de mis pensamientos(poco profundos, sinceramente). Tengo que prepararme para ir al instituto. Abro mi surtido armario, y cojo ropa interior, un polo blanco con el escudo de mi colegio, una americana negra con los bordes violetas con otro escudo igual al del polo, una falda plisada negra, unos pantis negros y unos zapatos...tambien negros! Esque aquí somos muy alegres(sarcasmo). Me visto rápidamente y me encierro en el baño. No tengo la costumbre de ducharme por la mañana porque tardo muuuuuuuucho. Me peino los largos mechones blancos que adornan mi cabeza. Los recojo en una coleta para que no se noten lacios y sin gracia. Miro la hora en mi reloj de pulsera. ¡Son las 8! No tengo tiempo para desayunar. Cojo de la cocina un trozo de brioche y la mochila y salgo pitando de casa. Una vez fuera, me encuentro con Ela que me espera impaciente aunque siempre tiene menos ganas de ir a clase que yo.

- Anya, tengo que contarte algo super importante-me mira con cara de loca y me dice- ¿ Te acuerdas de Will, el que decías que nunca saldría conmigo porque le caigo mal?

- Sí, me acuerdo. No paras de hablar de él.

- Pues nos pasamos toda la noche hablando por "whats" y mira-me enseña toda la conversación y yo la leo de mala gana. ¡ Tengo cosas más importantes en las que pensar!- A que es super riquiño.....seguro que hoy me pide salir!

Se pasa todo el camino hablando de ese chaval, que encima pasa de ella, mientras yo pienso en que hacer con mi vida. Cuando llegamos a la entrada está ya Sarah espeŕandonos para entrar en clase. En cuanto Ela la ve, sale corriendo cara ella para contarle lo mismo que a mí. Sarah me mira como diciendo: "otra vez nooooo" pero a pesar de todo queremos a esa chica bajita y castaña que nos alegra el día.

Entramos en clase. Toca química. Un momento perfecto para pensar en qué decisión tomar. Entra el profe y empieza a poner fórmulas en el encerado. Ni me molesto en apuntarlas, Sarah seguro que me las deja. Tenemos un pequeño acuerdo que no viene al caso. Si me marcho, abandonaría a mis mejores(y únicas)amigas de verdad que tengo. Pero por otro lado, allí conocería gente nueva, especial como yo. Además aquí no encajo. Siempre me ha gustado lo oculto...

- Eh, Anya- Me giro y veo a Matt susurrándome- ¿Cuanto queda?

Miro mi reloj. Quedan 10 min pero como me cae mal, le digo:

- Quedan 20min.

Me hace una señal afirmativa. Me cae mal pero es tan guapo con su pelo rubio y ojazos verdes...bah que digo es un orco de Mordor en vinagre. Mira, otra razón para largarme. Allí seguro que hay chicos como yo que me entienden y seguro que no tan bordes como este. Bueno, para eso no hay que sudar mucho.

Toca el timbre y me veo absorvida por mis compañeros de química que salen en busca de el aula para la próxima clase. Sarah me agarra el brazo y me conduce por los pasillos. Coincidimos en todas las clases. La echaré de menos. Sobretodo a Ela que se me acaba de agarrar al brazo para no perderse.

El resto del día se me pasa como un sueño. Tras unos momentos incómodos con Matt, me refiero insultándonos, decido marcharme a aprender a controlar los elementos. Sí decidido. Llego a casa y me pongo a preparar la maleta con todo lo que puedo necesitar. Después de llenar dos maletones, decido sacar ropa porque solo dispongo de esas dos maletas. Ya con todo preparado, llamo a mi madre y le digo que me voy a dormir a casa de Sarah, y luego a Sarah para que me proteja. No hace preguntas. No doy explicaciones. Ceno sin ganas. Hoy mi madre tiene turno de noche en el hospital. Así que no hay posibilidad de que me descubra. Me meto a dormir con todo preparado para la medianoche. Estoy nerviosa.