Cuidado con lo que deseas|AIDAN GALLAGHER {CORRIJIENDO}

Capítulo 21

La mujer vio tanta sinceridad en sus ojos que no tuvo más opción que apartarse para que este siguiese el camino de su hija. 

-¡¡¡Papá!!!-.

-¡¡¡____!!-Gritaban ambos desde distintos puntos de la casa.

La joven comenzó a llorar con desesperación, le faltaba aire y el humo no la dejaba respirar, se acercó a una de las ventanas y se apoyó en esta, la cual daba al jardín, allí fue donde Aidan la encontró de espaldas tosiendo por falta de oxígeno, no se lo pensó dos veces, aunque a él tambien le costase respirar, corrió hasta ella llegando justamente en el momento en el que ella se desplomaba encontrando sus brazos y no el esperado ardiente suelo. 

-Aidan...-Dijo en un esfuerzo. 

-Tranquila yo estoy contigo- Dijo animándola hasta que cerró los ojos y no los volvió a abrir. De pronto una puerta se empotró contra la pared del pasillo en el que había fuego que les impedía bajar por las escaleras principales y el suelo comenzaba a chirriar. 

-Dios por favor, ayúdanos- Rogó Aidan acariciando el cabello de la joven y cerrando los ojos con fuerza. Luego besó su frente y con gran esfuerzo logro ponerse en pie con ella. 

-¡¡¡____!!!!-Se oía gritar a alguien tras el fuego. 

-Está conmigo, pero no puedo bajar!!!-Gritó sin esperar que fuese útil pero deseándolo. 

-Bajaré a buscar ayuda no se muevan de la ventana-.

Aidan asintió como si se les viese y miro el bello y cuidado jardín por la ventana, luego miró con dulzura a ____ y juro en voz alta. 

-Ese sueño o lo que nos haya pasado se hará realidad, con tus padres vivos, te juro que saldremos de aquí, te lo juro, mi vida-Dijo dejando a un lado eso de "los hombres no lloran" demostrando su miedo a perderla .

Al abrir los ojos pudo notar como ya el humo había desaparecido y el oxígeno ya no le faltaba, miró a un lado y pudo ver como Aidan estaba en otra camilla dormido y sujetando su mano en el aire. 

-Es todo un héroe -Dijo alguien al otro lado, sobresaltándola.

-Mamá me has asustado-. 

-Lo siento mi vida-Dijo acariciando su mano libre. 

-¿Y papá?-preguntó algo asustada-.

-Esta afuera con tu tía, ¿Cómo estás, ____?-.

-Bien...ahora...mamá yo solo quería...-.

-No hace falta que te disculpes, no sé si fue casualidad , o tal vez mi hija sea una adivina pero te lo agradezco. E incluso a tu tía, te prohíbe pagar los destrozos-.

-Pero si yo...-. 

-Tranquila mi vida, no tenías otra salida, ella lo comprende, además ya sabes lo terca que es-.

-Igual pondré de mi parte-. 

-Hija, no sabes el miedo que pase estando allá fuera y no pudiendo hacer nada por ti-. 

-Prefiero morir a ver como lo hacías tú si yo no lo evitaba mamá-.