🥀~Amor en Peligro

🥀 14.

-Nos volvemos a enamorar-

Meliodas: nos volvemos a encontrar Elizabeth

Elizabeth: eh? Como conoce mi nombre? Volver a encontrar?

Meliodas: lo siento, mi nombre es meliodas un gusto Elizabeth

Elizabeth: un gusto meliodas-sama

Meliodas: donde están tus padres?

Elizabeth: en el castillo 

Guardia: señorita Elizabeth!

Desde ahí lo supo todo, elizabeth era hija adoptiva de la amable, dulce y cariñosa reina Erza junto con su amado rey cariñoso, atento y muy amable; Como lo supo? simple, desde aquel día donde se encontró con la peliplateada con aquellos hermosos ojos azulejos como el océano, su hermoso cabello plateado como aquel símbolo que representaba al reino, esa piel pálida que representa la hermosa nieve que da cada 6 meses, aquella perfección acompañada con un vestido amarillo con ligeras decoraciones blancas, zapatillas casi del mismo color y finalmente una hermosa diadema brillante tal cual diamante pero aquel brillo era opacado inconscientemente por la dueña de esta.

Rey: Entonces desde hoy en adelante -se levanto de su trono y con espada en mano se encamino para estar frente donde se encontraba arrodillado aquel rubio con ojos verdes esmeraldas que paso de un simple viajero a un guerrero más de aquel reino que tenía la más dulce y deliciosa fruta que podías encontrar- Meliodas Demon, te declaró guardia personal de mi hermosa y única hija Elizabeth Lebay -dice pasando el frío filo de aquella espada qué ah sido pasada de generación a generación- Entendido?

Meliodas: sonríe alegre mientras responde con su típica voz gruesa- ¡Sí! 

Elizabeth: se abalanza hacia meliodas, mientras de sus ojos brotan lágrimas de felicidad al saber que su más grande amigo la iva a proteger de todos  los males que rondaban por el reino- Mel!

Meliodas: presta atención a la peliplateada qué se encontraba caminando junto a el- dime?

Elizabeth: cuando este en peligro tu vendrás a rescatarme?

Meliodas: por supuesto, siempre estaré ahí para protegerte

Después de aquella charla se dirigieron a lo que más le gustaba hacer a la albina; Jugar en los prados donde se podía a ver todo tipo de flores desde rosas rojas hasta peonías que dejaban a la vista de cualquiera un espectáculo de pétalos que son separados de las hermosas flores, rosas, orquídeas, girasoles de aquel hermoso lugar no tan secreto, solo aquella chica de hermosos cabellos plateados y aquel rubio que la amaba más que nada, ese lugar fue exclusivamente creado para ellos. Era una tarde muy hermosa como para estar al aire libre disfrutando de la brisa, encontrarle formas a las nubes, pedir deseos soplando el muy conocido "Dientes de León", todo era pacifico, todo estaba totalmente en calma, estaban tan tranquilos que no se dieron cuenta que sucedía a las afueras del reino.