En las noches también me persiguen mis demonios.
Me acorralan en mi propia mente.
Entonces te dejo salir.
(Eh aquí me dependencia).
Te dejo salir en recuerdos.
En lo más bonitos.
Y mi mente se calma al recordar el latido de tu corazón, en como susurras despacio un te amo, en como me dices mi vida.
Ellos no se van, pero los mantienes en calma.
Lo se, soy un cobarde, que no sabe luchar solo.
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Para: Bonita
PoesíaY para mi; que esto sea el diario de mis días felices, pero también de mis peores pensamientos contra mí.
