Demasiado joven para morir.

71 10 3
                                    

Busque el reloj despertador de la mesita de Luz y lo acerque a la ventana para poder ver. Faltaban solo dos horas y media para que fueran las ocho, y a las ocho y media salia el micro que iba a llevarme a la ciudad. Muy lejos de Bristol, de mi madre, de mis amigos, de la poca familia que tenia... De todo lo que había sido mi mundo hasta ese momento.

Irme de Bristol era algo nuevo, por un lado me gustaba porque podría salir de ese pueblito a conocer nuevas personas. Aquí todos nos conocemos, ya sabia todo lo que había por saber, y hacia ya por lo menos un año que había empezado a sentir que me quedaba chico.

En cambio una ciudad era una cosa nueva, una hoja en blanco por llenar, un libro nuevo por leer, y las posibilidades parecían infinitas. Se abría una puerta, y nadie -ni siquiera yo- sabia lo que podía encontrarse del otro lado. Por eso estaba un poco intranquila; por eso y tambien porque iba a mudarme a la casa de unos parientes de los que sabia muy poco. Tenía miedo de como iban a tratarme, de si me llevaría bien, y de si podría conseguir amigos en aquel lugar.

Pero mudarme a un departamento yo sola no era muy tranquilizador. Sola en la gran ciudad. No. Estar en una casa familiar y en compañía de unos parientes sin importar si los conocía o no parecía algo mucho mejor.

Al menos no debía preocuparme por lavar mi ropa, o cocinar.

Pero una pregunta rondaba por mi mente hacia algunos días. ¿Que iba a pasar con mi vida ahora? Tenia miedo de estar poniendo demasiadas expectativas, de que allá no me esperara nada demasiado grande, ni espectacular. Y faltaban apenas dos horas y media para irme y enfrentar el futuro.

Volví a apoyar el reloj en su lugar y me recosté para intentar dormir aunque fuera tan solo un ratito.

Pero,no fue buena idea. Imagine esto: Iba en el micro, viene un auto de frente chocamos cae a un barranco el micro gira dos o tres veces enfrente de unos caballos pastando en un campo cerca,, como si nada, porque, si yo muero la vida sigue su curso ¿No?

Pero porque pensas estas cosas Clara? Sos muy joven. Deberías tener mucho tiempo para hacer tu vida.

Pero nunca se sabe. Papá también era joven.... Nunca se es demasiado joven para morir.

MysteryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora