VIII

17 2 0
                                    


-Ustedes dos...?.

-El me mintio, solo quería corromperme y hacerme pasar vergüenza, me enseñó algo que no haría- dijo Vadiel.

-Ya deja tanto drama, te escuchas como una ex enojada.

-Tu solo me enseñaste algo para hacerme caer- me tomó por el cuello y me lanzó lejos.

-Hey amigo calmate- Nahuel se paró frente a él.

-No te entrometas- de un golpe lo tendió en el piso, yo me levante y me sacudí riendome por lo bajo.

-Y... Cuéntame- lo miré -Como hiciste para que en el cielo no se dieran cuenta de tu nuevo look?.

-Me hiciste pasar un infierno- corrió hasta donde yo estaba y de una patada me volvió a tirar en el suelo.

-Podrías dejar de hacer eso?- dije después de toser un poco de sangre.

-Después de volver solo al cielo, tuve que idear algo para ser juzgado, era obvio que si me llamaban a juicio caería, y la vida de  los  caídos es una... Materia fecal...- lo interrumpió mi risa.

-Materia fecal? el angelito no puede decir mierda?- dije entre risas

-Callate pedazo de... Demonio.

-Ayyyy no me digas cosas tan feas- dije aun riendo.

-Imbécil... Como venia diciendo- retomó su narración- No estaba en mis planes ser un caído, no salí de mi morada en muchos días en que harían y preguntarían al verme, pero un dia tuve que hacerlo, fui solicitado para un plan táctico ; cada ángel ahí presente desplegaba sus alas para afirmar su rango, yo era el único que las ocultaba y no se quedaron sin preguntar "¿y tus alas?" "¿Qué pasa con tus alas?" "¿Por qué no nos enseñas tu rango?". No quería enseñar que era un corrupto así que decidí inventar una historia, donde decía que los ángeles en la batalla fuimos sorprendidos por la espalda y un fuego arrasador nis consumió a todos, aunque para mi suerte yo si logre escapar por poco, una de mis alas no tuvo mucha suerte y fue quemada-  terminó de hablar y escondió sus alas.

-Puedes mentir de tal manera pero no puedes decir "mierda"?- me levanté frente a él y le di una patada en el pecho con algo de dificultad y cayó varios metros lejos de donde estaba- das vergüenza.

-No tenía otra opción- dijo levantándose y con la mano en el pecho.

-Siempre hay opción, no mereces llamarte ángel, tampoco corrupto, incluso te queda grande el titulo de caído- respiré profundo- y mas te vale que ese inútil de ahí  esté vivo- señalé a Nahuel.

-no me hizo nada, solo me hago el herido- levantó la cabeza para decirlo y luego volvió a hacerse el muerto.

-Ahh okay- sonreí y luego volví la mirada a Vadiel -En cuanto a ti... con que derecho vienes a decir tu que nos vas a mandar al inframundo?.

-Fui enviado para eso.

-Solo porque no tuviste los huevos para decir que fallaste y que eras un corrupto, porque no enfrentaste tu castigo y en vez de eso cambiaste los hechos. No tienes honor y espero que te pesen todas esas pérdidas de aquel día, porque no tuvieron un líder que los guiara contra mí, en vez de eso tuvieron un traidor que solo observó como mataban a cada uno de sus hombre; hasta un caído hubiese actuado, pero tu solo pudiste moverte cuando ya todos estaban muertos.

-Fue tu culpa, tu me engañaste.

-No me culpes por tus decisiones, no te obligue a nada, no es mi culpa que un ángel de "élite", un "líder" se dejara llevar por el poder, no es mi culpa que te dejaras llevar y cayeras en tentación, tú fuiste fuiste quien le falló a los tuyos.

-Fue por tus trucos- corrió hasta donde mí y me lanzó un puño que pude esquivar.

-Se supone que un ángel debería resistir a la tentación, más cuando es un líder y ejemplo; deberías agradecer que ese día murieron tus hombres, porque de no haber sido así, hubieran visto a la basura que tenían como líder- le dí un rodillazo en el estómago y cayó frente a mí- Es mejor que te vayas de aquí antes de que te haga desaparecer.

-Es...- tenía las manos en su estómago- Están abusando de su estadía aquí.

-Quien lo dice? Crees que me voy a volver porque es una orden del cielo?.

-Debes hacerlo.

-No debo hacer nada, vete antes de que me encargue de que ya no seas más un "ángel"- hice las comillas con los dedos.

-Eres de lo peor que puede existir, y no me podre ir hasta que ustedes estén de vuelta.

-Que triste que tenga que pasar esto- me encogí de hombros y lo miré -Bueno... triste para ti.

-No te tengo miedo- apuntó con su dedo índice en mi pecho.

-pues deberías- lo miré fijamente y mis ojos se tornaron totalmente negros por un segundo y luego volvieron a la normalidad.

-No lo hago, no eres más que una farsa.

-Yo una farsa? Me recuerdas quién mintió en el cielo para seguir como si fuera prefecto?- cuando terminé de hablar me golpeó repetidas veces y luego de una patada me lanzó lejos.

-Es mejor que te calles- camino hasta donde yo estaba.

-Mira pedazo de mierda...- me levanté y limpie sangre de mi boca -Yo me callo cuando se me antoje.



Se tiró sobre mí y lanzó varios golpes; lo empuje lejos de mí, luego corrí hacia él y lo golpeé repetidas veces, y él para librarse de mí, me dió la espalda y yo aproveche para darle un codazo en la columna vertebral, cayó al suelo arrodillado e imitando el movimiento de Nahuel, le estampe una patada en la cabeza, lo levante y de una patada en el pecho lo lancé contra un muro, cuando me estaba acercando corrió contra mí, saltó y me golpeo tirándome al suelo, luego de poner su pie sobre mi pecho me pateó varias veces en las costillas, y como pude en una de esas veces le agarré la pierna e hice que cayera,  yo me levanté y después de una putiza lo arrodille frente a mí.

Extiende tus alas...- mis ojos se volvieron a tornar totalmente negros -Te di la oportunidad de irte, te lo advertí, te dije que si no te ibas me encargaría de que no fueras más un ángel. Ahora extiende tus alas- como pudo desplegó sus alas; me hice detrás de él y puse mi pie en su espalda, justo en medio de sus alas y agarre una de ellas (la blanca y pura), lentamente empecé a tirar de ella y cuando empezó a desgarrarse de su cuerpo gritó por piedad implorando que lo matara, y escuchándolo termine de desprender el ala de su cuerpo, cuando estaba en el suelo retorciéndose por el dolor y cubierto de sangre, puse mi pie en la herida que había dejado y pegandolo totalmente al suelo, escuchando un grito desgarrador, finalmente separe el ala de su cuerpo, las tiré ambas a su lado y escuche como gritaba desesperado hasta caer desmayado.



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 20, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Leaving the underworldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora