Cap 14

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Aarón

En verdad existe o sigo alucinando, porque en verdad aún sigo sin comprender si en serio estoy en esto o sigue siendo na broma pesada de mi padre. Desearía mil veces no haber escuchado nada de esa conversación.

-Bien sabes que tu cuerpo es mi lugar favorito en todo el mundo, y no dudaría en volver a vos cuando sea necesario...pero, la hora feliz terminó- Karina me observa desde abajo, seguía recostada sobre mi pecho, bordeando las lineas del tatuaje-Estos momentos deseo con mi alma que sean eternos, pero, debo irme cariño-Se levanta y recuesta su cuerpo sobre su brazo para así mirarme directo a la cara, voy colocando mi brazo debajo de la cabeza y sonrio para inhalar una bocanada del cigarrillo, observando el rostro de Karina me acerco un poco a ella y se lo aviento en la cara, sonrío nuevamente colocando un mechón de cabello detrás de su oreja.

-Te vez horrible- Ambos reímos, y me levanto recostándome sobre mis brazos, para estar a su misma altura-horriblemente hermosa-Observo directo esos ojos recién despiertos, me acerco lento y le rozo los labios.

-Me voy-Dice apartándome y levantándose para ir agarrando del suelo su ropa-Deberías de apurarte sabes?-Habla mientras se coloca los pantalones y mi remera. Levanto la mano en forma de afirmación-Me llevo esta, así tengo un buen recuerdo tuyo- Debería de prestar atención y decir algo, pero no puedo, vuelvo a inhalar el cigarrillo. Ignorando cada palabra de Karina.-Sabes? Deberías de dejar esa manía de decirme cosas tiernas, recuerda es sólo un juego-Observo a Karina y esta me guiña el ojo para así desaparecer por la puerta.

-Tu también -Estiro mis brazos hacia los costados de la cama y me despeino el cabello. Hace años que Karina trabaja para mi padre, y siempre jugábamos. Pero ya me esta hartando, me levanto de la cama para ir al baño, existen tantas formas de cagarte la vida, y elegiste esta. Abro la ducha y voy entrando de a poco.

-Aaron, estás despierto?-Se escucha de lejos la voz de Agus.

-Estoy en el baño-Grito debajo de la ducha, demonios. Tomo el cepillo de dientes y lo mojo para meterlo a mi boca y asearme de manera rápida.

-Necesito salir, puedes quedarte con Abril un momento?- Atrás de la puerta se escucha como va golpeando el saco de boxeo. Con el cepillo en la boca, tomo la toalla y me la envuelvo en la cintura, para salir del baño y encontrarme a Agus de espaldas a mi.

-Cllsllaro-Saco el cepillo de dientes de la boca y sonrío-Sólo dejame vestir o te molesta si voy así-Vuelvo a colocar el cepillo en la boca, y me dirijo al closet.

-Amanecimos de buenas por lo que veo-Agus rie

-Algo así- agarro una remera blanca y mis pantalones negros-Ya vuelvo-Realmente tenía en mente ir a lo de mi padre, necesitaba aclarar varias cosas, pero desgracia.Me meto al baño y escupo, voy vistiéndome rápido. Agarro el peine y me lo paso-Claro que si.

Salgo del baño y ya no encuentro a Agus, decido ignorar y voy tomando mis zapatos, colocandolos uno por uno sin apuro. Decido despeinar un poco el cabello con las manos. Salgo del cuarto y voy a la cocina, esperando encontrar a Agus, por algún lado.

-Estoy en la sala-Se escucha el grito de Agus, que supuse se dio cuenta que lo buscaba. Ignorándolo nuevamente voy preparando el café.

-Te molesta si pregunto a donde vas?-Levanto un poco la voz-Qué hora vuelves?-Agrego.Aún no despierto del todo, así que definitivamente necesito del café.

-Me llamaron de urgencia en el cuartel, es sobre mi madre-Agus entra a a cocina se sienta en una de las sillas alrededor-No me explicaron por teléfono, pero según entendí, son algunas cosas que había dejado para mi y Abril, no sé muy bien, pero vuelvo antes de las ocho. No creo que tarde mucho, pero antes de la media noche ya vuelvo-teniendo la taza en manos, espero a que el café se caliente un poco más-No tendrás problemas? si no quieres puedo ver...

-No, no ,no tranquilo. Dime, hay algo que pueda usar como un calmante o algo así? Sólo si decide enloquecer y por algo se le ocurre querer matarme-Digo riendo tomando el jarrón con el café y colocandolo en el vaso.

-Sólo el calmante que solemos utilizar, pero no creo que sea necesario. Desde hace días que sigue durmiendo. Aún no ha despertado por suerte. Sólo tienes que estar ahí-Asiento y me acerco a él.

-Vamos- tomo un sorbo del café y paso en frente suyo dirigiéndome a la puerta. Ambos salimos y caminamos lentamente, disfrutando de la brisa mañanera-Qué tan dificil va a ser cuidar de tu hermanita...

Llegamos a su casa, y Agus decide subir a su cuarto, dejándome en la cocina no sin antes mostrarme las jeringas y haberme explicado cómo usarlas, tenía en mano una jeringa llena del calmante, iba jugando y observando el liquido subir y bajar, mientras la pasaba de mano en mano. De pronto...Comencé a escuchar algunos ruidos, provenientes de arriba, sé que no debería. Realmente no debería, pero lo hice, comencé a subir lentamente sobre las escaleras, voy llegando al cuarto de Agus veo la puerta abierta, decido entrar lentamente.

-Agus-Susurro. Observo la cama con esperanza de encontrar a Abril durmiendo como había dicho Agus. Pero no, observo la ventana y esta estaba cerrada. Nadie estaba en el cuarto hasta que de pronto se escucha una puerta abrirse, doy vuelta la mirada para encontrarme a Abril recién duchada con el cabello mojado.

-Qué !!!-Abril se asusta y decide abrazarse, yo me quedo tieso, observando sus labios totalmente rojos-Vetee!!!-Grita

-Qué haces?-Agus me habla desde atras haciendome volver a mis casillas.

-Lo siento, no era mi...

-Andatee!!!-Me sobresalto al escuchar eso, y salgo cerrando atrás mío la puerta.

Agus me mira desconcertado y yo decido alzar los hombros

-Qué carajos-Ambos decimos al mismo tiempo y reímos.

-Suerte-Dice en tono burlón, golpeándome el hombro-Vamos-Camina directo a las escaleras y yo le sigo no sin antes dar un mirada a la puerta del cuarto de Agus. Sonrío para mi y niego

Va a ser un día largo

SiriusDonde viven las historias. Descúbrelo ahora