despues de henshin emergence

Epilogo 2

Esto había sucedido una noche después de hacer un ritual, todo marchaba bien en mi casa cuando de entre las luces llego una oscuridad inmensa que absorbió la luz de las lámparas y de entre aquellas tinieblas se mostraron seres, ellos me miraban y hablaban en un idioma extraño, ellos me miraron un momento, sin embargo, mi cuerpo se volvió ligero

– Este chico está bastante cerca de ser un buen platillo – dijo uno con una sonrisa llena de colmillos

– Sí, es bastante curioso – añadió otro con una nariz esquelética

Eran diferentes entre sí pero podía sentir una aura muy maligna que me revolvía el estomago

– quienes son ustedes? – pregunte

Unos se rieron

– Pero si tú nos llamaste, deberías saberlo – contesto uno de cuerpo decadente con la nariz esquelética

– Yo solo quería abrir un portal – dije

Uno con dos orejas podridas me miro y se echó a reír

– no nos mientas, sabemos el por qué – dijo

– Aunque a decir verdad a nosotros nadie nos invoca, nosotros elegimos a quien aparecernos – agrego aquello con la sonrisa y piernas flacas

– entonces que son? – pregunte

– demonios? Yokai? –

Todos simplemente se rieron, sus cuerpos no eran nada que pudiera describir con exactitud pero sus risas dolían como taladros en el cuerpo

– oye no nos digas tan feo – dijo aquello de la sonrisa

– de donde vienen? –

Se miraron entre si y al unísono respondieron

– De una dimensión más allá de esta donde se pueden ver muchos mundos y de donde surgen muchos más, en pocas palabras rebasamos las dimensiones de cualquier tiempo –

Uno de ellos tenía unos ojos humanos en su cuerpo obeso que parecía reventar en cualquier momento, de ellos solo había uno que era una persona normal que vestía muy elegante, con el cabello arreglado mantenía un porte de caballero

El clima se enfrió y mi aliento se volvió blanco

– y que hacen? Matan a cualquiera como en las películas? – pregunte

Se acercó uno que no tenía rostro solo era piel oscura

– Nos regimos por una regla, no inocentes los demás entran en el plato – todos asintieron

– pero matan cierto? –

Uno de ellos con el pecho abierto y con un corazón seco en su interior hablo

– Sí, aunque algunos preferimos que alguien más lo haga es como hacer una buena acción – dijo

– Entiendo –

Sus cuerpos ocupaban el espacio de una manera perturbadora, ellos no parecían estar vivos y aun así respiraban o eso notaba en sus cuerpos extraños que pasaban de ser una neblina oscura a uno sólido, todos tenían cambios muy grandes

– y que cosa hacen? – pregunte

– a que te refieres? – pregunto aquel de la sonrisa

– Que es lo que los hace elegir – guardaron un momento silencio

– A mí me gustan las traiciones – dijo el de la sonrisa

– A mí la locura – dijo el de las orejas podridas