-Valentín sos tan bueno en esto, si supieras lo bien que improvisas.- Él sonríe chocando su frente con la mía.
Estabamos sentados uno en frente del otro como indios, el tiraba free y juro que mi corazon por cada palabra que salía de su boca sentía más amor por él.
Me odiaba por ser así.
Mi primera regla al conocerlo fue no enamorarme, no engancharme, no quererlo, no amarlo.
Pero todo eso se transformó en lo contrario.
Sabía que el me quería no era pelotuda, pero no como yo lo quiero.
Sabía que Valentin nunca jugaba con las personas, eso me hacía pensar aún más que yo debia alejarme.
Pero era imposible.
Estaba cansada de este revolución en mi panza, ir a mil por hora no era lo mío, tal vez si el estuviera como yo, lo disfrutaria pero no era así.
-¿En que pensas Zai?
-Pego eso.- Digo con referencia al porro.
-Mentirosa.
-Callate bobo.
Amago a pegarle pero el me frena tomando mi muñeca poniéndome encima de él.
Ahí estabamos abrazados, en ese frío piso de madera como si flotaramos en una burbuja, una burbuja que debía romper lo antes posible.
Pero era imposible sus brazos eran cálidos y se sentían esponjosos por el buzo que tenía. Que buzos hermosos tenia este loco.
-Zaira...
-¿Valen?
-Te vi y perdí el calibre.
Reí abrazando su cuello rozando mi nariz fría en su cuello calentito.
Él improvisaba escribiendo sus temas, yo pensaba en como iba a disfrutar verlo triunfar, aunque no sean canciones para mí, él era un huracán de emociones vivas y llenas de luz.
Merecía todo el reconocimiento del mundo.
▪
-¿Che Zai te acordas la otra vez que te hablé del Luna Park?
Volteó a ver a Valentin que mordía su labio inferior viéndose algo nervioso.
-Ajam, si y vimos la compe contra Papo.- Volteó a seguir preparando el Melón Vino.
-La avalancha de las rimas revienta en el Luna Park otra vez...
Me quedo dura unos segundos recalculado lo que acaba de decir ¿Se le había dado hacer el show en el Luna? No podia ser.
-¡Valentin la puta madre!
Grité saltando a su brazos y ahora si había soltado su risa, estaba coloradito y todo. Me derretía de amor.
-Amor no me toques soy famoso.- Dice y yo sonrío con ternura juntando nuestras frentes.
-Sabia que la ibas a romper Valentín.- Dejo un beso en su mejilla.
Con todas mis fuerzas me separé, si seguía asi después mi corazón y cabeza me atormentaban toda la noche.
-Veni trae eso nos vamos con los chicos quiero contarles.- Dice volviendo a mí y buscando el melón para irnos.
No dudé en ir, estaba tan feliz por él, por todo lo que lograba, sabia que merecía todo esto y más.
Pero mi interior cada vez me sentía más un estorbo en su vida, una cobarde, pasaban los meses y esos roces amistosos me mataban.
▪
-Te miro, te miro fijo, y te quiero tanto así... haciendo lo que te apasiona para miles de personas...
-Es que Zaira nuestra mirada es la fuerza más linda de todas.- Repite lo que escribió en una canción.
Mi corazón latía fuerte. Habia soñado que me dedique una canción, una de sus hermosas frases creadas por su hermosa cabecita.
-Quiero decirte tantas cosas ahora... pero...
Estaba a escasos cetimetros de mi boca podia sentir su delicada y calmada respiración en mi nariz, podía sentir el tornado de mariposas en mi estómago golpeando fuerte.
-Yo quiero hacerte una en especial...
Eso que acababa de decir me hizo cerrar inconscientemente los ojos y esperar hasta que fui interrumpida.
-Woos decile que somos amigos tuyos asi nos dejan pasar.- Habla de lo que aca puedo escuchar Valentino.
Veo como Valentín se muerde el labio bajando su cabeza riendo.
Lo imite con vergüenza seguramente hecha un tomate volteando a la puerta donde se veía un patova no dejando pasar a los pibes.▪
Ni idea la cuarentena... hay que sobrellevarla.
Va a ser cortita es más casi la tengo terminada ahre que nadie la va a leer jeje