Mis noches de sueño || Chriserick FS.

Capítulo 5.

El ojiverde despierta a la mañana siguiente y sin apuro se levanta a sacar su celular del uniforme, y vuelve a la cama, sintiendo los brazos del chico rodearlo con firmeza.

Sonríe, porque es encantador tener a alguien que se aferre así a él por las mañanas e incluso todo el día.

Revisa sus redes un momento mientras espera que la alarma que el castaño aseguro haber puesto suene, y se encuentra con el comentario del chico en la última foto que subió.

Y cada día que pasa pienso que eres tan bello, que pareces irreal:3.
Bésame si eres irreal y si eres real quédate una vida conmigo♡.

Entra a su perfil y comienza a seguirlo, en todas las redes.

Apenas un par de minutos más tarde ya muchos de sus seguidores también comienzan a seguir al castaño y, sin pensarlo mucho, y sabiendo que no va a arrepentirse, sube las foto que se han tomado en su comida romántica y al salir del cine, y como pie de foto agrega:

Creo que quedarme una vida contigo es la opción, porque soy real.
Tan real que cuando despiertes no sólo un beso te voy a dar.

Y claro, un montón de comentarios respecto a esas fotos.

Sonríe satisfecho, porque sabe que tiene a alguien que le recibirá con los brazos abiertos aún luego de saber que estará trabajando en algo vulgar.

Al despertar lo besa, y como dijo, mucho más que sólo una vez.

Christopher lo invita a una ducha con él, y claro, acepta.

Salen a ponerse sus uniformes y bajan a tomar desayuno. Para buena o mala suerte de ambos, la familia de Christopher ya está despierta y, desconcertada por ver al ojiverde ahí todos se vuelven locos preguntando mil y un cosas, y el castaño se limita a responder, simplemente lo presenta como el amor de su vida y todos se emocionan, llamando a Erick con emoción, a ver qué piensa de eso.

Tímido, responde sincerándose:

—Supongo que él también es el amor de la mía.

Luego de un rato de festejar, los chicos se apuran a hacer lo que sea que les falta y salen hacia el auto de Erick, camino a la escuela.

Entran tomados de las manos bajo las miradas de todos y nadie se queda con las ganas de preguntar si son pareja.

Aunque no lo hayan hablado, ambos están de acuerdo con decir que es así y por supuesto que están bien dando esa respuesta mientras ríen de la sorpresa de todos.

Los chicos no están ahí, y a ambos les parece muy raro, pero recordando que tendrían alguna fiesta entendieron que quizá se habían dormido.

Pero las clases avanzan y ellos tienen que poner atención a cada una.

No es hasta el tercer módulo que llegan los tres con cara de mierda, sin siquiera poder mirarse a los ojos.

Simplemente han llegado juntos porque no les quedó de otra, pero en todo el camino no han hablado, y apenas llegan ahí, se alejan lo más que pueden.

Un poco más tarde salen al receso y ellos se acomodan de la manera separada más larga que les es posible.

Richard al lado del ojiverde, Zabdiel al lado del castaño y Joel solo del otro lado de la mesa.