Final Fantasy VII Swords Brothers

Reunión de 1° Clase

Minutos más tarde de llamarle, Zack apareció en el despacho de Lazard, Sefirot estaba leyendo el informe de la misión de Zack en una de las dos mesas que se encuentran en los laterales de la habitación, una de ellas era la que Sefirot solía utilizar y la derecha la solía utilizar Iris, la cual estaba mirando otro informe, este era el de la misión de busca y captura de sus dos ex-compañeros. Lazard estaba dado la vuelta y Zack estuvo varios segundos esperando que esté se girará, y al hacerlo es cuando anunció su ascenso:

  – Mis felicitaciones. Desde este instante... considérate ascendido a SOLDADO de 1° Clase –la sala estuvo un momento en completo silencio e Iris quiso romperlo

  – Felicidades Zack –añadio ella, a lo que su hermano volteó para ver una breve sonrisa de su hermana para felicitarle

  – Uhm... Pensé que me alegraría más

  – Puedo entenderlo –declaro el presidente que se dejó apoyar por el brazo de su silla– Han pasado muchas cosas en tan poco tiempo. Zack, me temo que necesito tus servicios de nuevo.

  – ¿Es que piensas hacer que me enseñen otro trabajito? –la reacción de ambos fue bastante parecida, Sefirot se sentía culpable e Iris igual pero al estar de espaldas a ellos mirando los documentos apenas se pudo notar, y cuando Zack se volteó no recibió la mirada de su hermana

  – Lo siento

  – Sí, claro –su tono desanimado retumbaba en la cabeza de Iris, era extraño ver, o en este caso, escuchar a Zack tan desanimado

  – Te pondré al corriente de todos los detalles, pero antes de eso... Ve a la sala de reuniones y ponte el uniforme de los 1° Clase

  – Voy contigo –añadio la soldado

Ambos hermanos fueron a por su nuevo traje. Iris estuvo fuera esperando que Zack saliera del baño. Hasta que salió con el traje nuevo, aunque no era mucha diferencia de color azul había pasado a negro.

  – Pero mira que bien, a juego con el pelo y todo –dijo Iris con tal de alegrar a Zack, aunque era todo lo que sabía hacer las últimas semanas.

Sefirot, Zack, los alumnos de Angeal, todos eran almas en pena. Por más que ella lo negara, parecía el pañuelo de lágrimas de toda la compañía intentando animar a todo el mundo

   – La compañía ha decidido eliminar a Génesis y sus secuaces –dijo al levantarse Lazard– Lo que incluye también a Angeal

   – ¿Y quiere que lo haga yo? –reclamo Zack

   –  No, el ejercito de Shinra se encargará –contesto mientras con las manos en la espalda volteara

   – ¿Y yo qué?

   – No se fían de tí –se volvió a girar y mirarle cara a cara, mientras que la chica se fue a acercando poco a poco para explicárselo a su hermano hasta que Sefirot lo hizo él mismo

   – Creen que tus sentimientos influirán en tu juicio –añadio acercándose a ambos hermanos

   – Ya, ¡Pues claro! –dijo apoyándose en la mesa de Lazard al no aguantar la situación

   – Por eso mismo iré yo también

   – Iremos –corrijio la chica de forma muy seria– Contad conmigo –con esto último, Zack se recompuso

   – ¿Para matarles? -si Iris estaba sería Zack no había palabras para describir su rostro

Ninguno de los que había en la sala respondió. Sefirot, sorprendió a su amiga ya que pudo escuchar una risa proveniente de su amigo. Pero todo eso fue interrumpido, de repente, las ventanas, las estanterías, todo se cerró y empezaron a activarse y sonar las alarmas. Al igual que ellos 3 soldados, se alertaron ya que no sabían que estaba pasando excepto Lazard