One in a Million [MDZS-BL]-Wangxian-

Capítulo I

Wei Wuxian tardó en darse cuenta de que no estaba en su cuerpo, y que tampoco era un adulto. Ver cómo esas dos personas que decían ser sus padres le cargaban con tanta facilidad era prueba suficiente para que reconociera que estaba en el cuerpo de un bebé.

¿Estoy soñando? ¿No se supone que morí?

¡¿Por qué demonios está ocurriendo ésto?!

¡¿Y quién, por todos los espíritus, es "A-Li"?!

.

.

Ah, soy yo.

No solo no estaba en su cuerpo, sino que ambos adultos le llamaban con un nombre distinto; "A-Li, A-Li" era lo que sonaba por toda esa casa de aspecto humilde cada que le llamaban o hablaban sobre él. XianLi, ese era su nombre, uno totalmente diferente al que recordaba.

Ah, qué desgracia. Renacer en el cuerpo de un bebé, ¿Es ésto lo bajo que he caído? ¿Un castigo por lo que hice en mi vida pasada, por el camino que tomé?

Pero, ¿Por qué recuerdo lo que ocurrió siquiera?

¿De verdad ésto no es un sueño?

Notó rápidamente que, obviamente, su cuerpo era muy débil, ni siquiera podía gatear aún y se la pasaba en los brazos de sus...sus padres.

Padres, una palabra que hace mucho no utilizaba cuando hablaba de su familia, Wei Ying en su anterior vida no había conocido por mucho tiempo lo que era el calor de una familia. Al principio, sus padres siempre estuvieron con él, hasta que cumplió los cinco años y fueron separados cruelmente.

No recordaba el rostro de su madre, ni su voz, ni el calor que le daba cuando era abrazado por ella. Lo mismo iba para su progenitor. Recordaba vagamente algunas situaciones; A sus padres y a él mismo paseando por un lugar cubierto de nieve, corriendo y jugando siendo perseguido por su padre y después alzado por su madre. 

Los extrañaba mucho, pero eso no significaba que no hubiera amado a la familia que tuvo posteriormente.

Por ésta misma razón, volver a estar rodeado del calor de unos verdaderos padres le ponía muy melancólico. La mujer le abrazaba con mucha dulzura, lo acunaba contra su pecho y le susurraba hermosas palabras llenas de cariño, el hombre lo levantaba en brazos y reía antes de darle un beso en la frente, la seguridad que había en el aura del otro provocaba que Wei Wuxian se sintiera a salvo, seguro.

Un sentimiento que solo tuvo al estar rodeado de ciertas y pocas personas, personas que podía contar con los dedos de sus manos.

El recuerdo de lo último que vió antes de desvanecerse de su mundo hizo que suspirara mentalmente.

Ah, es verdad...

Me pregunto qué será de él ahora...Ni siquiera pude despedirme.

Mientras más pensaba en ello, más deseaba volver a esa vida.

(...)

Wei Wuxian se sintió muy avergonzado cuando sus padres le cambiaron de ropa, viendo cómo su madre le depositaba con cuidado encima de un mueble y le hablaba con un tono suave afirmando que se había ensuciado y que debían cambiarle. A pesar de la situación graciosa, el Wei nunca creyó que estaría en un momento así, pero entonces una duda se presentó en su mente y no pudo evitar mirar hacia cierto lugar.