" Տᵐᵃˡˡ Տᵗᵃˡᵏᵉᖇ " (KⁱʳⁱBᵃᵏᵘ)

15 ✓ ¡It's Here!✓

- ¡¿Qué crees que haces?!- Kirishima abrió sus ojos a la par, siendo pateado del abdomen y finalmente; caer al suelo.

Kirishima emitió quejidos de dolor, sobando su cabeza y abdomen.
Levantó su cabeza para divisar la figura del rubio ceniza con su característico ceño fruncido y leve rubor.

- Bakugou - Emitió en voz animada; mostrándole una sonrisa y acercarse a él. - ¡Buenos días! Dime, ¿Cómo te sientes?.

- Con ganas de matarte - Respondió con irritación.

Kirishima emitió carcajadas nerviosas, algo que Katsuki no soportó y decidió levantarse de su colchón. Algo que le fue impedido de último momento gracias a Kirishima; quién lo tomó de le muñeca y jaló de él.

- ¡Oye!- Exclamó con tono carmín en su rostro.- ¡¿Qué haces?!.

Observó muy de cerca el rostro del pelirrojo, incluso mirarle sus orbes rojizos y profundos; concentrados en un sólo punto específico.

- Sólo estoy tomando tú temperatura. Para qué alarmarse - Respondió con su labio sobresalir.

Finalmente cruzó miradas con Los orbes de Katsuki, aún sin apartar su rostro; le sonrió.

- Supongo que estás bien. - Comentó.

El menor chasqueó y apartó con su mano el rostro del pelirrojo. - Lárgate.

- Eres malo, un gracias estaría bien. - Exclamó.

Katsuki le fulminó con la mirada. - Bien, bien - Kirishima extendió sus brazos, se apartó del colchón y suspiró. - Me voy, por favor cuídate.

- ¿Me ves tonto?.

- Los directores han llamado varias veces ayer, preguntaban por tú recuperación y comentaron algo sobre una escena fijada en tú papel. - Respondió, moviendo la perilla.

- Como sea.- Respondió.

Kirishima le miró por última vez preocupado por la estabilidad del ceniza. Lo pensó muchas veces en microsegundos y finalmente; cerró la poca distancia de la puerta.

- ¿Sabes qué? Mentí, aún no te sientes bien.- Excusó; volviendo en dirección al menor.

- ¡Puedo cuidarme sólo!.

- No, necesitas compañía y soy la persona perfecta para este trabajo.- se Excusó; acostándose sobre el regazo del menor y darle una sonrisa entre dientes.- me quedaré contigo.

Esas palabras más esa escena; no hacía más que sonrojar al ceniza. Aunque no lo admitía, era un sueño que solía querer que se hiciera realidad. Ahora lo apreciaba.

Katsuki desvió su mirada, aún con su rostro rojo de vergüenza e inconcientemente cubrió su rostro con ayuda de su brazo.

- Como quieras... -.

    — ¡Cierto!— Exclamó el pelirrojo. — ¿Quieres desayunar? Prepararé el desayuno. Tú... Uh.. quédate aquí y no te muevas.

— puedo moverte estúpido.

— Mí deber es cuidarte. — Excusó.

Kirishima a paso torpe; comenzó a correr  a pasos ruidosos, incluso escucharse desde la habitación del menor los estruendos que este generaba en la cocina.

Katsuki posó su mano sobre su rostro, deslizando la desde su frente hasta su barbilla; estirando sus facciones en signo de su molestia.

Se levantó de su colchón una vez más, importando poco el hecho de que está estuviera hecha desastre.
Se dirigió al interruptor y encendió las luces; dándole un poco de vista a aquella habitación.