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One Shot.

-¡Papá! ¡Cooper me está molestando! -Gritaste, completamente molesta, y como eras la princesa de papá, por supuesto que él iba a acudir en cuanto gritaras, y como Cooper también sabía que eso iba a pasar, gritó en respuesta:

-¡No es verdad, ella me golpeó! 

Indignada, frunciste el ceño y gritaste -¡Mentiroso! ¡Tú empezaste! Llegaste a mi recámara y lo primero que hiciste, fue echarte un pedo! Y...

-¡________! Ese no es lenguaje para una señorita como tú, y Cooper, deja de molestar a tu hermana, es hora de comer -Terció la voz de tu papá, Clint.

Lanzaste una mirada asesina a Cooper y te montaste de caballito en tu papá -Todavía me amas, ¿verdad, papi?

Él sonrió y te sostuvo entre sus brazos -Eres la princesa de mis ojos, ¿Cómo podría?.

-Oh, ¡pero yo quiero ser como la tía Nat! -El sonrió y depositó un beso en tu nariz.

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Habían terminado de comer y era tu turno de recoger la cocina y lavar los trastes, como después irían por helado, tu papá te ayudó para terminar aún más rápido.

-Un gato fue criado por perros -Dijo, mientras depositaba algunos platos, vasos y una olla -y se creía perro.

-No entiendo la moraleja de tu historia, papá -Dijiste, pensando que respondería algo como "el que se junta con lobos, a aullar aprende", o una cosa así.

No, pues no tiene, solo se creía perro -Respondió, guardando el resto de agua de limón en el refrigerado.

Agarraste los vasos y platos, dejando la olla al final, porque según tú, esas siempre iban al último.

-Entonces tu dices: ¿Qué tiene eso de raro? -Habló.

-¿Qué tiene eso de raro?- Preguntaste, sonriendo.

-Que era un gato que se creía un perro- Respondió.

Lanzaste una carcajada, de lo absurdo que eso era y él también se rió.

-¿Te acuerdas de Phineas y Ferb? 

-Ajá -Dijo mientras ponía una silla en su lugar -Bueno, no. No me acuerdo, pero si sé que es...creo.

-Bueno, es un programa de televisión y el villano se llamaba Dr. Doofenshmirtz...

-Ajá, ¿y era malo o bueno?

-Uh..era malo, se supone que eso hacen los villanos papá, ser malos -Dijiste con obviedad.

-Ah, y ¿Era una serie, verdad? -Preguntó.

-Si, papá, era una serie.

-Ah, y ¿cómo era? ¿Phienas y Fer?

Reíste y asentiste, no ibas a corregirlo, porque eso solo alargaría la conversación y se te olvidaría lo que querías decir.

-Ah, y ¿luego?

-Bueno, nada, creo que a él lo criaron los leopardos -Dijiste encogiéndote de hombros.

-Ah -Después de unos segundos agregó: -¿Al malo o al bueno?

Suspiraste -Al malo, papá, estamos hablando del malo.

-Ah, no del bueno?

Volviste a reír -No papá, no al bueno.

-Ah ¿Y luego?

-Y tenía un globito que era su amigo-

Él asintió -¿Un globo?

Querías gritar, pero no, serías paciente, siempre eras paciente.

-Si pá. un globo -Reíste negando.

-Ah, ¿y luego?

-Pues nada, lo perdió porque simulaba ser un gnomo de jardín.

-¿QUÉ? ¿Un gnomo de jardín?

yo asentí -Se había roto un gnomo de jardín en su casa y su mamá lo obligó a pararse y fingir ser uno, que si se movía lo iba a castigar, no lo sé, algo así leí, nunca fui tan fan de la serie.

-¡Pues que serie más rara! y oye, ¿Qué tiene que ver eso con el gato que se creía perro?

Me encogí de hombros y reí -Vamos por los helados.