(Tulio; Bodoque; Kids AU)
⟩Episodio levemente más largo de lo habitual⟨
Era una hermosa tarde de primavera, de esas que pondrían contento a literalmente cualquiera que se asomara a ver el día, tapizado con rayos de sol y flores volando por el ambiente gracias a la agradable brisa; en una de las tantas escuelas primarias de Titirilquén, se escuchaban con fuerza y claridad los gritos y risas de niños que disfrutaban de su receso, acompañados también de rechinidos emitidos por columpios y juegos.
En uno de los extremos del edificio, en las afueras de la cerca que separaba la calle de las instalaciones, sentado en el pasto, se hallaba un pequeño conejo rojo, más relajado que nunca, disfrutando de un buen libro, su lectura se vió interrumpida por alguien más que trató de llamar su atención.
-Hola.
Volteó a ver al otro niño, un pequeño de estatura poco mayor a la suya, ojos color ámbar y uniforme escolar. Lo miró indiferente, pero aún así contestó.
-Hola.
-¿Cómo te llamas?
-Juan Carlos Bodoque.
-Yo soy Tulio, Tulio Triviño Tufillo- alegó muy orgulloso.
-Oh, qué interesante, ¿Qué quieres?- dijo devolviéndole la vista a su libro.
-Pues hablar contigo.
-¿Para qué?
-Pues...- su mirada se entristeció - yo ya te ha-había visto aquí otras veces y pensé que te gustaría compañía.
-Emm, ¿gracias? Supongo, pero como verás estoy ocupado, no necesito compañía, puedes ir a molestar a tus otros amigos.
-Oh...
El pequeño colegial se quedó callado un momento y retomó la palabra.
-¿Qué lees?- preguntó en tono curioso.
Suspiró molesto y respondió -El Quijote de la Mancha.
-Qué nombre tan raro, ¿Por qué se llama así?
-Así es el apellido, "Della mancchia", es italiano.
-¿Y no te parece aburrido?
-¿Qué importa si es aburrido? Es un libro de cultura que todos deberían leer- Se puso de pie, indignado.
-¿Por qué?
-Por que si no sabes de cultura, eres un ignorante, y yo no soporto a los ignorantes.
-Entonces, ¿No crees que deberías estar en la escuela?
-Mi mamá dice que la escuela es para idiotas.
Retomó su asiento y ambos cruzaron miradas, el pequeño Tulio se había percatado de que la nariz del contrario se estaba moviendo arriba y abajo apresurada, lo cual le pareció tierno.
-¿Y cómo le haces para no ser ignorante?
-Leo muchos libros, aunque sean aburridos, me harán inteligente y algún día seré científico, para probar la existencia de extraterrestres.
-Ay sí que eri raro ¡Me caes bien!- expresó con toda la sinceridad y esbozó una enorme sonrisa.
Al escuchar eso se sorprendió, nunca nadie le había dicho algo así.
-¿Po-por qué dices eso?
-¡Porque eres divertido! ¿Yo no te caigo bien?
Intentó responder pero se quedó pensando.
