°SPOTLIGHT° (R.S x J.JK)

1.1

—Hey! Jungkook!!— El mencionado se dignó a ver a la cara a su jefe con ojos iluminados.

No sólo por el amazónico sol típico de Busan y perverso en las tardes.

—Si, Sr hwang?.

—Vé a casa con mi bicicleta te la presto por hoy— sintió lastima por el simple hecho de que ha esperado el transporte por horas con sus largos mechones de cabello reposando en su cara fuera del humilde negocio y no ha tenido éxito en regresar a casa.

Generaba tristeza y cualquiera se compadecería con el corazón estrujado. Jungkook lo miró sin creer.

—Pero... No es correcto es decir le pertenece a usted y cómo regresará a casa después? Yo me rehúso a-

—No acepto eso como devolución es una orden, de otra forma no regresarás y sería cruel dejar a un adolescente de 14 años afuera durmiendo en un pequeño mercado de Busan. Además lamento decirte que el autobus ya no vendrá.

No le quería bajar más los ánimos pero la imágen era suficiente y su amabilidad no la rechazaría.

—Oh... Pues se lo agradezco de toda sinceridad enserio!! si se lo puedo pagar de la forma que sea y le parezca mejor sólo dígame y lo haré—Sonrió para culminar.

Se preocupaba por los demás sin lugar para excusas a pesar de que no lo recibe para nada a cambio.

—No mentalices eso ahora anda vete ya!! Se hace tarde!!.

Lo apuró checando que su bicicleta esté del todo bien y asegurar que no le ocurra ningún accidente por lo que optó por finalmente entregársela.

—Nos vemos mañana, ten cuidado y la devuelves de acuerdo?.

Jungkook asintió estrechando sus manos en agradecimiento puro.

—Dé por hecho eso muchísimas gracias!! Tenga un gran resto de día y cuídese— Ya que no haría otra cosa allí se fue y llegaría rápido gracias a la bicicleta que usualmente usa su jefe para llevar y exportar alimentos de su negocio.

Era un tanto lejos y exploraba con manos en los manubrios y pedaleando, como una cámara grababa todo lo que sucumbia alrededor y las miles de personas incluso mejor vestidas desde su punto de vista.

Con mejor situación, con celulares extendidos en tamaño, con más seguridad y visuales de alta calidad, con mejor vida, con padres y madres.

Se comparaba mucho y sentía un completo marginado, un gramo de polvo más de la humanidad sin significado alguno enviado para rellenar un vacío que él mismo no puede acaparar.

No era envidia sino el deseo de obtener al menos un poco de lo que ellos tienen.

Aprecia mucho el aroma que es como una clase de confort y brisa abrasadora que es natural y estimulante donde sea que pise. Busan es así enfatizándolo sin olvidar nada.

Ser un niño que está de más en una sociedad como la que es incluso más fácil apuntar a alguien de lo normal. Apuesta que en otra parte del mundo es distinto y lo es.

Presiones de la juventud.

30 minutos se sintieron como un segundo y si su casa hubiese estado justo al lado todo el tiempo.

—Debí traer algo... Apenas se me ocurre ahora—Se autodijo Al bajarse de la bicicleta con una brisa muy agradable recorriendo sus brazos descubiertos, golpeando su cabello hacia atrás como una señal de algo.

Le gustaba aportar aunque sea un poco a su hogar y darles un pedazo de felicidad con hasta mínimos detalles. Si ayudaba a aclarar las cosas o generarles una sonrisa vale la pena.