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“¿Qué nunca has querido acentuar las estrellas con tu propio brillo? Talvez así las veas y comprendas mejor".

Jungkook en su segunda semana en Melbourne ha experimentado el no querer soltar lo que tiene.

¿Porqué el querer seguir sufriendo cuando puedes elegir iniciar de cero?, estar con una nueva familia y ver a diario los radiantes ojos de una chica especial.

Renunciar no es nunca una opción.

La noche cayó y Jungkook compartió su tiempo con la pequeña integrante de la familia jugando en el extenso jardín con una vista muy hermosa.

La sonrisa no le cabía, no conocía ese gesto facial desde siempre hasta ahora.

—Soy una chica superpoderosa—Dijo la pequeña Taylor lanzando su balón con fuerza hacia él, se impresionó de que casi le arranca la oreja.

Tiene una fuerza increíble, gracias a eso se fue hacia el otro extremo en el pasto y tuvo que ir a buscarla.

—Ya has matado a alguien a mi parecer.

—Tengo 7, no puedo hacer eso aún—Rió aunque sonó muy atrevido de su parte.

—Espérame—Dijo debido a que se le extravió el objeto redondo y metió la mirada en todas partes pero no aparecía, casi mete la nariz por debajo del manto terrestre.

Taylor lo creía un conejo real.

Cuando miró en las cercas que hay al cruzar pudo distinguir que en la casa de enfrente hay varias personas y está alguien que conoce.

—Rosé??—Murmuró antes de que casi se le salieran los ojos.

Siguió viendola unos instantes y estaba con 2 chicos y 2 chicas sentada en la parte trasera de un jeep con ellos hablando.

En cualquier tipo de ángulo es crucial para la vista humana, ella es más que eso honestamente.

—Ah.. cierto, ella conoce toda ésta calle—Recordó lo que le dijo el día pasado cuando ambos se devolvieron juntos del instituto.

Talvez conozca a sus nuevos padres, quien sabe?.

—Jungkook? No te veo—Insinuó la pequeña buscándolo en el negro exterior, su tono de voz era notablemente alto y llegó a los oídos de la rubia en reverberación.

Rosé se quedó mirando a Jungkook con una sonrisa apenas lo vió, esa señal lo hizo que se congelara.

El pelinegro se cayó hacia atrás por estar haciéndose pasar de espía incubierto sobre ella. Como un gato sólo que no en cuatro patas.

—Ay no—No pudo ni hacer un movimiento más después de levantarse rápido al sentirla detrás suyo—Demonios.

—Jungkook, estás bien?—Las cordialidades ante nada, Sentía sudor pues ella es bastante perceptiva y rápida.

Se volteó en slow motion.

—Si, es que soy muy tonto enfrente de chicas hermosas—Se mordió la lengua cuando se le salió ese cumplido que la cubrió de rojo pasión en las mejillas.

—Crees eso enserio?.

—Em...—Se bloqueó como muro teniéndola enfrente suyo apoyada en la cerca que los separaba sonriendo dulce a propósito.

Ya había dicho suficiente. Le miró así hipnotizante para ver su reacción, aparte es muy adorable y blando con esa expresión de asustado.

—Gracias, lo empezaré a creer desde ahora—Los reflejos creados en ella lo mantuvieron ocupado sin decir nada—Cómo estás? Disculpa si no te conté que vendría, talvez no te interesaría.

°SPOTLIGHT° (R.S x J.JK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora