shelter: Canela para el corazon vol. 0

Sugiero

Sugiero que la sociedad es un hormiguero, la esperanza de vida un capricho y el amor una enfermedad venerea. Pensé mientras mamá miraba desde la luna ver arder aquella tierra donde se supone que su hija sería refugiada, pero aun me pregunto la razón de todo esto, aun no le encuentro sentido a tal atrocidad.

Supongo que desde mi destierro solo puedo observar atravesar de un espejo, lastima que no pueda hacer nada por esas vidas desperdiciadas, pero que más da llevo siglos atorado en un desierto que no tiene fin buscando una manera de poder volver a casa, si es que aun existe, qué pena ser desterrado por una profecía a único lugar donde no perteneces a ningún lado.

Continuó mi viaje y llego a un pequeño lago con un poco de agua y unas cuantas palmeras, no debo bajar la guardia pues lo más probable es que alguien más de uno conozca de este lugar. En el camino me encontré el cadaver de una persona parece algo mayor, pero sus heridas son frescas acaba de morir seguramente, claramente hay alguien en este sitio. Escucho a una niña gritar más allá, persigo sus gritos entrándole a un bosque de palmeras un poco pequeño, en el centro veo una cabaña rodeada de manticoras, ¿que demonios hacen manticoras aquí?

Corro hacia a una y con mi daga le apuñalo el cuello en lo que esté animal procede a atacarme con su cola de serpiente, si me muerde se acabo, así que lo evado de ahí procedo a mirarlo fijamente y al los segundos cayó desplomado.

Aun sigue uno con vida esta distraído con la niña así que no se da cuenta de mi presencia aunque empieza a huir de manera precipitada, que extraño, ellos nunca huyen. ¿Que lo habrá espantado?

Abro la puerta y veo a la niña muerta con un cuchillo clavado en el cuello, al parecer se suicido, que lastima la verdad.

Recojo cosas que me sirvan en el camino y sigo mi viaje con la carga de otra víctima a la cual no pude salvar, si tan me uniera escuchado cuando les sugerí no seguir los consejos de un profeta.