El Verdadero Amor (Imector)

Suegros

Narrador

Bueno lo que pareció ser un sueño se volvió realidad, pero en esa ocasión, Ernesto no se enamoro de Imelda, o al menos eso dice el, en una semana es el día de la boda, así es boda.

Un pequeño recuerdo sobre la perspectiva de nuestros enamorados.

Hector

Hector - ¿Quieres casarte conmigo?

Imelda - No, lo siento

Y me desperté de golpe, dios estoy muy nervioso llevamos casi un año saliendo todo lo que había soñado literalmente se cumplió sin el hecho de los problemas con Ernesto.

Narra Imelda

No puedo creer en una semana me caso, lo único malo que veo en esto es que mis padres van a venir, solo les dije que tenía pareja, pero no que me casaba en una semana, mañana les presentaré a Héctor, y tendré que decirles de la boda.

Oscar -Imelda

Felipe -Nuestros padres

Imelda -¿Ya llegaron?

Oscar -Si

Felipe -Esperemos y

Oscar -Papá acepte a Héctor

Imelda -Pues lo va hacer, claro que me gustaría que lo aprobará, pero aunque no lo haga, me cásare con Héctor.

Felipe - Imelda, a Héctor

Oscar -Lo conoces de hace como 3 años

Felipe -Y ya te vas a casar

Oscar - A nuestros padres

Felipe -No les gustará

¿? -Que ya nadie saluda en esta casa

Oscar -Es mamá

Felipe -Si Imelda da miedo

Oscar -Imaginate mamá

Oscar y Felipe -¡Ya vamos!

Imelda -(suspira) Vamos

Victoria -Hay mis niños están tan grandes

Oscar -Hola

Felipe -Mamá

Victoria -Veo que siguen terminando la frase del otro

Imelda -Y no tienes idea de cómo desesperan

Oscar (padre) -Hija, cómo está eso que tienes novio

Victoria -Oscar

Oscar (padre) -Que

Imelda -Pues si, tengo pareja y llevamos un año

Oscar (padre) -Y porque apenas nos estamos enterando

Imelda -Porque...

Oscar -El se llama Héctor y

Felipe -Quiere conocerlos

Oscar (padre) -Me quieren decir que si ese muchacho no quisiera conocernos nosotros nunca nos hubiéramos enterando

Imelda -Si

Victoria -Imelda

Imelda -Mañana va venir y espero que lo traten bien

Dicho eso salí de mi casa, mi padre es un poco celoso, estaba caminando por la plaza, cuando escuché su bella voz, me acerque y cuando me vió sonrió, terminando su canción, empezó a cantar la que me escribió a mi.